El fraude electoral convocado por la dictadura de Nicolás Maduro para este domingo registró 80% de abstención, ha sido ampliamente rechazada y no reconocida por la comunidad internacional.
Uno de los primeros países en denunciar dichos comicios fue Estados Unidos, quien a través de su secretarios de Estado, Mike Pompeo, calificó la jornada como “un fraude y una farsa, no una elección”.
“El fraude electoral de Venezuela ya se ha cometido. Los resultados anunciados por el ilegítimo régimen de Maduro no reflejarán la voluntad del pueblo venezolano”, señaló el secretario de Estado norteamericano, a través de sus redes sociales.
Por su parte, la embajada de EEUU en Venezuela, describió a Maduro como un falso mandatario, que “celebra una farsa de elección para montar una asamblea nacional falsa”.
Maduro es un falso mandatario, celebra una farsa de elección para montar una asamblea nacional falsa. Tenían el fraude preparado de hace meses con resultados convenidos, sin importar lo que pasara. Solo buscan fotos de “votantes”, no muestran cómo extorsionan, con votos forzados.
— Embajada Virtual de los EE.UU., Venezuela (@usembassyve) December 6, 2020
“Tenían el fraude preparado de hace meses con resultados convenidos, sin importar lo que pasara. Solo buscan fotos de votantes, no muestran cómo extorsionan, con votos forzados”, publicó la cuenta de la embajada de EEUU en cuenta de Twitter.
En América Latina, el gobierno de Panamá “lamentó que las elecciones parlamentarias en Venezuela se hayan celebrado este domingo 6 de diciembre en condiciones que no garantizaron un proceso democrático, transparente, inclusivo, libre y justo para el pueblo venezolano”.
“Las debilidades institucionalidades del proceso, los obstáculos que enfrentaron los partidos de oposición, la poca participación registrada por medios de comunicación independientes y la ausencia de la recomendable y ampliamente aceptada observancia internacional siembra dudas inaceptables en los resultados de esta consulta”, declaró la cancillería panameña en un comunicado.
Colombia, país vecino, publicó en la noche un comunicado a través de su cancillería en la que “no reconoce los resultados de las elecciones fraudulentas del 6 de diciembre promovidas por el régimen ilegítimo de Nicolás Maduro sin las garantías de imparcialidad, libertad, igualdad de oportunidades, justicia y transparencia del sistema democrático”.
“No es posible reconocer legitimidad a unos comicios que se llevaron a cabo sin la existencia de una autoridad electoral neutral, independiente y transparente, sin la participación de todas las fuerzas políticas, en particular de la oposición democrática perseguida por el régimen, y que no tuvieron una observación electoral objetiva y fidedigna”, publicó la cancillería colombiana en su comunicado.
Además, las autoridades colombianas denunciaron que “el régimen dictatorial de Nicolás Maduro busca prolongar la usurpación del poder, y asegurar el control sobre la Asamblea Nacional, única institución democrática que sobrevive en Venezuela”.
El ministro de Exteriores de Uruguay, Francisco Bustillo, dijo el sábado que no espera “nada” de las elecciones parlamentarias de mañana en Venezuela y aseguró que Montevideo está dispuesto a colaborar en la búsqueda de una salida cuando “exista realmente voluntad” de hacerlo por parte del Gobierno “dictatorial” de Nicolás Maduro.
Por ese motivo, Uruguay no estuvo “activo” en el Grupo de Contacto Internacional (GCI) sobre Venezuela, integrado por países europeos y latinoamericanos, hasta que no vea “una respuesta seria” de parte del régimen de Maduro, señaló Bustillo en una entrevista a Efe en Bruselas, donde estuvo tres días para intentar impulsar la firma del acuerdo Unión Europea (UE)-Mercosur.
El jefe de la diplomacia uruguaya indicó que, si aún no han abandonado ese grupo, es por “respeto” a los Estados que lo integran.
En América del Norte, Canadá tampoco reconoció el resultado de los comicios celebrados este domingo en el país caribeño “porque el proceso no cumplió con las condiciones mínimas para un ejercicio libre y justo de la democracia”.
“Las elecciones libres y justas solo pueden ocurrir cuando se respetan plenamente los derechos democráticos. Seguimos pidiendo una transición democrática pacífica y elecciones presidenciales libres y justas. Canadá siempre apoyará al pueblo de Venezuela en su lucha por restaurar la democracia”, declaró la cancillería canadiense.
Por su parte, los ministros de Exteriores de la Unión Europea rechazarán este lunes los comicios e impulsarán el “máximo consenso” con la oposición y los países de la región sobre el escenario que se abre hasta el 5 de enero, cuando acabe el mandato de la Asamblea Nacional que preside Juan Guaidó.
“Tomaremos las consecuencias políticas de no reconocer la legitimidad de estas elecciones (…) Nuestra idea, de aquí al 5 de enero, es tener el máximo consenso posible sobre la evaluación de las elecciones del 6 de diciembre y el estatus de la nueva Asamblea Nacional”, dijeron el viernes fuentes europeas.
La UE no reconocerá el resultado de los comicios porque considera que no cumplen los mínimos estándares democráticos y esa será la reacción de los jefes de la diplomacia cuando se reúnan el lunes en Bruselas, en un encuentro previsto de antemano, pese a celebrarse el día después de las elecciones legislativas.