Florida pronto podría hacer la transición de algunos sitios de prueba de COVID-19 administrados por el estado a sitios de vacunación y está trabajando para encontrar lugares en comunidades desatendidas donde se pueda administrar la vacuna, dijo el lunes el gobernador Ron DeSantis.
Por Telemundo 49
En una conferencia de prensa en el Orlando Health South Seminole Hospital, DeSantis dijo que los próximos dos meses serán “un momento decisivo” en lo que respecta a la administración de la vacuna.
“No hay tiempo que perder”, dijo DeSantis. “No creemos que sea hora de descansar”.
DeSantis dijo que el estado está trabajando para identificar sitios de prueba administrados por el estado que se puedan convertir en sitios de administración de vacunas, y está desplegando 1,000 enfermeras adicionales para ayudar con los esfuerzos de vacunación.
Además, el estado está trabajando para encontrar lugares en comunidades desatendidas donde se pueda administrar la vacuna. DeSantis dijo que más de 500 personas mayores ya han recibido la vacuna en una Iglesia en el condado de Escambia.
Como parte del esfuerzo del estado para obtener un mejor acceso a la vacuna, DeSantis dijo que cualquier instalación administrada por el estado estará abierta los siete días de la semana y le pidió a los hospitales que consideren ampliar sus servicios a siete días a la semana.
DeSantis también dijo que los hospitales que no están haciendo un buen trabajo administrando las vacunas podrían ver que sus asignaciones se trasladen a hospitales que estén haciendo un mejor trabajo.
“No queremos que las vacunas estén inactivas en algunos sistemas hospitalarios”, dijo DeSantis.
Las vacunas seguirán estando reservadas para personas de 65 años o más, trabajadores de atención médica de primera línea y personal y residentes de centros de atención a largo plazo, dijo DeSantis.
“Realmente creemos que es importante poner a nuestros adultos mayores en primer lugar”, dijo DeSantis.
Hasta el domingo, más de 255,000 personas en el estado han recibido la primera dosis de la vacuna COVID-19 desde que comenzaron las vacunaciones a mediados de diciembre.
Florida agregó más de 10,000 nuevos casos de COVID-19 el domingo, junto con casi 100 muertes más relacionadas con el virus.