Cientos de personas protestaron este lunes por el derrumbe de un cobertizo durante un funeral en el norte de la India que causó 24 muertos, un accidente que apunta a la negligencia y a la precariedad de la obra municipal.
El accidente ocurrió el domingo en un crematorio en la localidad de Muradnagar, en el estado de Uttar Pradesh, cuando se derrumbó un cobertizo bajo el que se resguardaban de la lluvia decenas de personas.
Los manifestantes bloquearon una de las principales calles de la urbe para pedir un gesto contundente contra los culpables del derrumbe y reclamaron una compensación apropiada a las familias de las víctimas.
Aunque el gobierno local anunció ayer una indemnización de 200.000 rupias (unos 3.000 dólares) para los familiares de los fallecidos, los manifestantes demandaron hoy una compensación mayor, al tiempo que reclamaban ayudas para los heridos.
De acuerdo con el último recuento de víctimas, en el derrumbe murieron 24 personas y otras 18 resultaron heridas, aseguró a Efe Iraj Raja, superintendente adjunto de la Policía de Ghaziabad, distrito al que pertenece Muradnagar.
Raja explicó además que hasta el momento se han producido tres arrestos en relación al suceso y que esperan detener a un cuarto fugitivo “pronto”, aunque reconoció que por ahora desconocen el motivo exacto del accidente.
“No podemos decir nada sin un informe técnico”, concluyó.
El jefe de gobierno de Uttar Pradesh, Yogi Adityanath, ordenó ayer una investigación exhaustiva de las causas de lo ocurrido, al tiempo que surgían denuncias de los ciudadanos sobre la corrupción y la negligencia en las contrataciones públicas.
Los accidentes de este tipo son frecuentes en la India debido, a menudo, al precario estado de las infraestructuras y a la falta de mantenimiento.
EFE