La muerte de la top model Stella Tennant, el pasado 22 de diciembre, conmocionó al mundo de la moda. Fue su propia familia quien anunció el “fallecimiento repentino” de Tennant, sin dar más detalles. Pero ahora, tres semanas después, ha revelado que se suicidó por los problemas mentales que sufría. Tenía 50 años.
Por Infobae
La modelo aristocrática, nieta de Andrew Cavendish, el undécimo duque de Devonshire y Deborah Mitford, fue hallada muerta en su casa de Duns, Escocia, en vísperas de la Navidad. Su familia ha explicó en un comunicado que Stella estaba “mal desde hace un tiempo”.
“Sentimos profundamente que le resultara imposible seguir adelante, a pesar del amor de aquellos cercanos a ella”, añadieron en un comunicado.
La familia ha hecho pública la causa de la muerte de la modelo porque cree que es importante “crear una conciencia social” sobre los problemas de salud mental que con frecuencia se malinterpretan y ha pedido también que se respete su privacidad.
Tennant era madre de cuatro hijos, Marcel, Cecily, Jasmine e Iris, de entre 15 y 22 años, fruto de su relación con David Lasnet, de quien se separó en agosto tras 21 años de matrimonio.
Su aspecto andrógino la catapultó al estrellato de la moda en los años 90, desfiló para los principales diseñadores de la época y fue la musa de Karl Lagerfeld.
El que fuera director creativo de Chanel hasta 2019 la descubrió en la portada de Vogue Italia publicada en 1993 y le ofreció un contrato en exclusiva como imagen oficial de la firma, aunque luego Tennant también prestaría su figura a diseñadores y casas como Alexander McQueen, Calvin Klein, Versace o Prada.
En el transcurso de su extensa carrera en la industria de la moda, trabajó para reconocidas revistas de como Harper’s Bazaar y Vogue, mientas que también posó para campañas para marcas como Hermès y Burberry, entre otras.
También apareció en la ceremonia de clausura de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, deslumbrando junto a otras supermodelos británicas como Kate Moss, Naomi Campbell y Karen Elson.