La investidura este miércoles de Kamala Harris como la primera vicepresidenta de Estados Unidos se vive con especial entusiasmo en su pueblo ancestral indio, donde los residentes celebran el histórico momento con el lanzamiento de petardos y el reparto de dulces tradicionales.
Thulasendrapuram, en el estado meridional de Tamil Nadu, vive con orgullo que la nieta de P.V. Gopalan, un antiguo residente de este pueblo de extensos arrozales, se convierta hoy en una de las mujeres más poderosas del mundo, una hazaña que han inmortalizado con carteles con su imagen sonriente por todo el municipio.
“Estoy muy, muy feliz. Todos estamos orgullosos de la hija de nuestra tierra”, manifestó a Efe G. Manikandan, propietario de una pequeña tienda de comestibles, que añadió que han disfrutado también en su honor de un banquete de idli, vada y sambar, platos del sur de la India que dice son unos de los favoritos de Harris.
El vecino se mostró entusiasmado y declaró que esta mañana organizaron oraciones especiales en un templo hindú para que Harris se convierta “en la próxima presidenta de los Estados Unidos”.
Antes de que eso ocurra deberá jurar como vicepresidenta en una ceremonia frente al Capitolio en Washington, un poco antes de que Joe Biden preste juramento como nuevo presidente de EE.UU.
Thulasendrapuram parece que cierra hoy con la investidura un ciclo festivo que comenzó el día que se proclamó en noviembre la victoria electoral del tándem Biden-Harris.
A LA ESPERA DE UNA VISITA
La maestra Anukampa Madhavasimhan explicó a Efe que “algunos aldeanos han instalado grandes carteles para felicitarla con la esperanza de que encuentre algo de tiempo en los próximos cuatro años” para hacerles una visita en Thulasendrapuram.
Este pueblo se halla a unos 350 kilómetros al sur de la capital regional Chennai, de donde provenía la madre de la vicepresidenta, la investigadora contra el cáncer Shyamala Gopalan, que Harris ha definido a menudo como la principal influencia de su vida.
Precisamente en Chennai, Harris solía acompañar de niña a su abuelo materno, que ejerció como diplomático, en su habitual paseo por la playa con sus amigos retirados, con los que hablaba de política, derechos igualitarios o corrupción, según recordó en un discurso en 2018.
“No era consciente de ello en ese momento, pero fueron esos paseos por la playa con mi abuelo en Besant Nagar los que tuvieron un profundo impacto en lo que soy hoy”, relató esta mujer se que se convierte además hoy en la primera afroamericana (por parte de padre) y la primera persona de origen asiático en ser vicepresidenta.
EFE