La Unión Europea se reunirá con los ejecutivos de AstraZeneca el lunes para pedir más aclaraciones sobre por qué anunciaron inesperadamente un gran recorte en el suministro de la vacuna anti-COVID-19 al bloque para el primer trimestre del año, dijeron funcionarios de la UE.
AstraZeneca, que desarrolló su vacuna con la Universidad de Oxford, comunicó el viernes a la UE que no podía cumplir los objetivos de suministro acordados hasta finales de marzo. Mientras, un representante de la UE indicó a Reuters que eso suponía un recorte del 60%, hasta 31 millones de dosis.
La farmacéutica anglosueca ha recibido un pago inicial de 336 millones de euros (409 millones de dólares) por parte de Bruselas, según dijo a Reuters un segundo representante de la UE, cuando el bloque de los 27 selló en agosto un acuerdo de suministro con AstraZeneca por al menos 300 millones de dosis, el primero firmado por la UE para asegurar las inyecciones de COVID-19.
En virtud de los acuerdos de compra anticipada sellados durante la pandemia, la UE realiza pagos iniciales a las empresas para garantizar las dosis, y se espera que el dinero se utilice principalmente para ampliar la capacidad de producción.
“Los volúmenes iniciales serán inferiores a los previstos originalmente debido a la reducción del rendimiento en un centro de fabricación dentro de nuestra cadena de suministro europea”, dijo AstraZeneca el viernes. Se trata de una fábrica de vacunas en Bélgica gestionada por Novasep, socio de la farmacéutica.
La Comisión Europea informó que se había convocado una reunión con AstraZeneca tras el anuncio del viernes, y que está previsto que comience a primera hora de la tarde del lunes. AstraZeneca no respondió de forma inmediata a la solicitud de comentarios.
El representante de la UE, que ha participado directamente en las conversaciones con AstraZeneca, indicó que no había grandes expectativas sobre la reunión en la que se pedirá a la empresa que explique mejor los retrasos. El representante declinó ser nombrado debido a la naturaleza confidencial de las discusiones.
A principios de enero, Pfizer, que es actualmente el mayor proveedor de vacunas COVID-19 a la UE, anunció retrasos de casi un mes en sus envíos, pero horas más tarde lo revisó para decir que los retrasos durarían sólo una semana.
Los contratos de la UE con los fabricantes de vacunas son confidenciales, pero el representante de la UE que habló con Reuters no descartó posibles sanciones para AstraZeneca. Sin embargo, la fuente no detalló qué tipo de sanciones serían. “Todavía no hemos llegado a ese punto”, añadió.
Se espera que la vacuna de AstraZeneca sea aprobada para su uso en la UE el 29 de enero, y que las primeras entregas se realicen a partir del 15 de febrero.
Reuters