Una invención para africanos creada por un africano. Así es Supfrica, una aplicación similar a Whatsapp que se focaliza en las necesidades de los usuarios en el continente y la diáspora y reivindica los productos “made in África”.
A principios de enero, el sierraleonés Alhassan Hafiz Bakarr-Kanu hizo pública la versión de prueba de Supfrica.
En un tiempo récord, tres días, esta aplicación se descargó más de 100.000 veces en Google Play, la plataforma de distribución digital de aplicaciones móviles para los dispositivos con sistema operativo Android, a pesar de que aún no era el lanzamiento real.
“Los africanos y la diáspora africana buscan algo que les represente, algo propio y creado por ellos”, explica a Efe el creador de Supfrica.
Desarrollador de aplicaciones y diseñador de sitios web autodidacta, Hafiz, de 43 años, estudió empresariales en la Universidad Mount Ida College, en Massachussetts (Estados Unidos).
Después fundó Techfrica, una empresa tecnológica con sede en el país norteamericano y Sierra Leona, con la que ha desarrollado otras aplicaciones, siempre pensadas para el mercado africano.
Tras concluir que las demás aplicaciones de mensajería gratuita que utilizan la conexión a internet para hacer llamadas y vídeollamadas, pero también enviar fotos y vídeos, no están hechas para el mercado africano, Hafiz decidió en 2017 comenzar a desarrollar esta aplicación, cuyo nombre significa “Hola África” -utilizando la expresión coloquial del inglés “Sup”-.
“La mayoría de las plataformas no están pensadas para el mercado africano y, por eso, la gente lucha para crear empresas de propiedad negra y africana”, señala Hafiz.
“Puedes preguntar a los fundadores cuando crean estas aplicaciones si tienen en mente especialmente a los africanos o la diáspora africana y, honestamente, dirán que no. No está escrito en piedra, pero se sabe”, añade.
PENSADA PARA LAS ABUELAS EN ZONAS RURALES
A pesar del crecimiento exponencial de las ciudades africanas, la población del continente sigue siendo mayoritariamente rural. Más de un 59 % de los africanos aún vive en el campo, según datos de 2019 del Banco Mundial.
En esas zonas no es extraño ver un teléfono inteligente de última generación en una región en la que el 50 % de la población realizó sus conexiones con uno de ellos en 2020 -y se espera que alcance el 65 % en 2025-, de acuerdo con el último informe anual para África subsahariana de la organización de operadores móviles GSMA.
Sin embargo, muchas veces la red no supera el 2G (segunda generación de red de telefonía móvil, que ya ha quedado obsoleta), limitando la recepción de mensajes, pero también de fotos y vídeos, y hace imposible las llamadas y vídeollamadas a través de este tipo de aplicaciones de mensajería tan utilizadas.
Una de las mayores aspiraciones de Hafiz con Supfrica es “asegurar que las abuelas en zonas rurales con red 2G puedan hacer y recibir llamadas” a través de una aplicación como ésta, que usa la conexión a Internet y que hace menos costoso comunicarse con familiares y amigos tanto dentro como fuera del país.
Entre las demás aspiraciones de su creador, también busca que la información de los usuarios esté segura, protegida y sea privada, que las calidades de las llamadas, tanto de audio como de vídeo, “sean increíbles” y tener la capacidad de actualizar continuamente para que funcione bien.
ESPÍRITU COMUNITARIO
Esta aplicación también muestra el aspecto comunitario, tan relevante de las sociedades africanas, con la posibilidad de crear grupos de más de 500.000 personas, a diferencia de las 256 que permite Whatsapp o las 200.000 de Telegram.
Esta característica es importante “porque creemos en la unidad, un entorno comunitario es el mejor escenario”, apunta Hafiz.
Al ser una prueba, la aplicación tiene, por el momento, un logo provisional: un teléfono amarillo en el interior de un bocadillo de diálogo amarillo, verde y rojo, colores que comparten muchas de las banderas del continente, sobre un fondo negro.
Pero este logo podría cambiar, ya que el creador sierraleonés asegura que cuentan con dos versiones diferentes y que se decidirán por una de ellas cuando se lance la versión definitiva de la aplicación, prevista para marzo, cuando también debería estar disponible la versión para iOS, el sistema operativo móvil de Apple. EFE