Los anuncios efectuados acerca de la importancia del estado comunal como el medio necesario, para lograr el desarrollo de políticas públicas que van a dar los necesarios resultados efectivos, para alcanzar mejoras en las condiciones de vida de los Venezolanos y a la vez lograr un mejor crecimiento en el desarrollo del país. Solo generan mayor escepticismo en la población, los cuales han venido sintiendo de manera continua una sostenida desmejora en sus condiciones de vida con la aplicación del modelo de gobierno conocido como socialismo del siglo XXI.
Este modelo de gobierno aplicado por parte del estado ha sido inconveniente al interés nacional en todos los espacios de la vida del país, así como los bajos resultados obtenidos en la producción nacional por parte de las empresas públicas. Todos los cuales según los análisis realizados por instituciones nacionales e internacionales, son las causas de las desmejoras observadas en la preocupante disminución de la actividad productiva del país, con sus efectos en la pérdida de empleos y la drástica reducción del poder adquisitivo causada por la hiperinflación, al Banco Central tener que financiar el déficit público y las pérdidas millonarias causadas por el sostenimiento de las empresas públicas al estar la casi totalidad de ellas produciendo a pérdidas. Superando en estos momentos sus elevados montos con cifras superiores a las que se les otorgan por parte del poder central a los estados y municipios.
Lo que luce evidente es que el proyecto político del estado comunal, luce como una versión repotenciada del socialismo siglo XXI, en donde el estado asume mayores controles sobre todas las actividades de la nación, limitando más aún nuestros derechos ciudadanos establecidos en la actual Constitución vigente. Así lo podemos observar en todas las decisiones públicas llevadas adelante en los últimos años, las cuales demuestran cómo se impone el ejercicio del poder del estado como máximo rector de la vida nacional. No siendo escuchada y menos considerada ninguna de las observaciones realizadas por las distintas instituciones, que alertan sobre la inconveniencia de estas decisiones que vienen limitando aún más nuestros derechos ciudadanos establecidos en el texto constitucional y en la carta de derechos humanos fundamentales establecidas por las Naciones Unidas.
Lo cual nos indica que el estado comunal y el socialismo siglo XXI van de la mano, en la estrategia política del control total por parte de los poderes del estado de la Nación Venezolana.
Vicente Brito
Presidente
Red por la defensa al Trabajo,
la Propiedad y la Constitución.