Cómo el pepino de mar, “afrodisíaco del océano”, se volvió más preciado que el oro en Asia

Cómo el pepino de mar, “afrodisíaco del océano”, se volvió más preciado que el oro en Asia

En tráfico de pepinos de mar es un fenómeno que viene en aumento en las costas de Siri Lanka. Los animales, que están en peligro de extinción los comercializan en mercados de Asia y Estados Unidos.

 

 

Los pepinos de mar son una especie de equinodermo con cuerpos tubulares blandos muy parecidos a la verdura del cual adquieren su nombre, es un animal inusual, pero que juega un papel vital en los ecosistemas oceánicos y, sorprendentemente para algunos, en las finanzas de redes de criminales internacionales.





Por Infobae

Estos raros animales son muy valiosos, especialmente en el mercado asiático. Tienen muchas variedades pues existen unas 1.250 especies, 70 de ellas están protegidas y siete se consideran en peligro de extinción. En el mercado asiático los más preciados pueden llegar a valer hasta 3.600 dólares el kilo, y algunos -los más raros- como el Golden Sandfish, que tiene un color dorado muy característico, puede valer hasta 850 dólares la unidad.

En Estados Unidos, el marcado de pepinos de mar de contrabando ha crecido tanto que convirtió a estos animales en uno de los ‘commodity’ más deseados, multiplicándose por 36 su volumen de importación en los últimos 10 años.

Pero en otros lugares del mundo, como Sri Lanka, donde son encontrados naturalmente en el lecho marino, los pepinos de mar se han convertido en un elemento clave en la economía de los pescadores locales, que están siendo víctimas de organizaciones criminales que sobreexplotan la pesca de los pepinos, afectan el ecosistema y de paso amenazan la subsistencia de muchas personas en la isla.

“Los pescadores ilegales están cruzando nuestras fronteras y recolectando pepinos de mar en lugares donde buceamos normalmente. Estamos perdiendo nuestros ingresos y nuestras riquezas a causa de ellos”, le dijo a The Guardian Anthony Vigrado, un pescador de 31 años.

A medida que se alimentan de los detritos en los sedimentos, los pepinos ayudan a reciclar los nutrientes y excretar nitrógeno, amoníaco y carbonato de calcio, ingredientes clave para los arrecifes de coral. Su alimentación también ayuda a ralentizar la acidificación de los océanos por la actividad humana.

Un kilo de pepinos de mar puede costar hasta 3.600 dólares.

 

La principal demanda de los pepinos de mar viene de China y los países del sudeste asiático, donde son considerados un manjar culinario y son usados para la medicina tradicional. Por lo general, se comen en forma seca, conocida como bêche-de-mer o trepang . Algunos también los consideran erróneamente afrodisíacos, especialmente en China (además de que tienen forma pene, también pueden endurecer y expulsar sus tripas como mecanismo de defensa).

A lo largo de los años, Palk Bay y el Golfo de Mannar han sido testigos de una sobrepesca extrema de pepinos de mar. Para las especies más caras, las poblaciones globales se han reducido en más del 60%.

Ahora la pequeña isla tropical es un punto de acceso creciente para el contrabando ilegal y la caza furtiva. Al igual que Vigrado, más de 10.000 familias de pescadores a lo largo de las costas del norte de Sri Lanka están preocupadas por el estado de la pesquería.

Con los barcos ilegales destruyendo el equipo de los pescadores locales para capturar los pepinos de mar, Vigrado dice que algunos se han suicidado después de no poder pagar los préstamos.

“Toda su inversión se vio perjudicada por esto”, dice. “Estos barcos no se preocupan por ellos, y cuando cruzan a nuestras aguas, es una pérdida total para nosotros los pescadores”.

Este extraño animal es considerado un majar gastronómico en China, y también es usado para elaborar medicamentos.

 

AM Stanny Lambert, un apneista de 31 años de Vankalai en Mannar, dice que está entristecido y enojado por la cantidad de actividad ilegal.

“No es ético y estamos estancados, porque están recolectando todo antes que nosotros”, dice, y señala que él y su padre han sido pescadores autorizados de pepinos de mar durante 11 años y son los únicos que ganan la familia.

La mayoría de las actividades delictivas denunciadas se benefician de las diferentes regulaciones entre los países vecinos. Si bien Sri Lanka emite licencias de pesca y permite la exportación de pepinos de mar, India ha tenido una prohibición total de todo comercio de animales desde 2001.

Por lo tanto, los pepinos de mar ilícitos se capturan en la India y se introducen de contrabando en Sri Lanka, donde se exportan legalmente al sudeste asiático, o se exportan desde la India con un etiquetado falso.

En agosto pasado, tres hombres fueron capturados contrabandeando casi 1.000 kg de pepino de mar, valorado por la Guardia Costera de la India en 686.800 dólares en el mercado internacional, desde Tamil Nadu en India a Sri Lanka a través del Golfo de Mannar, con un caso similar el mes pasado .

“Si tiene un mercado legal de esa manera cerca de un mercado ilegal, el mercado legal se convierte en una gran fuente de lavado de pescado”, le dijo a The Guardian Teale Phelps Bondaroff, director de investigación de OceansAsia, cuyo informe reciente mapea los arrestos e incautaciones de pepinos de mar en los dos países.

Durante años, las autoridades de Sri Lanka e India han estado tratando de combatir este crimen marítimo. Pero a pesar del aumento del número de arrestos e incautaciones, nuevos casos muestran que el comercio ilegal se está extendiendo a áreas previamente intactas.

Ahora, con el aumento del valor de los animales, la explotación se está generalizando. La demanda de pepinos de mar ha provocado una violencia mortal en México, la participación con las organizaciones criminales yakuza en Japón y el contrabando entre la parte continental de Tanzania y Zanzíbar.

Parte del atractivo de los pepinos de mar es que son considerados afrodisíacos en algunas culturas de sudeste de Asia.

 

Según OceansAsia, el crimen organizado del pepino de mar se está extendiendo más lejos de Palk Bay y el Golfo de Mannar hacia las áreas subexplotadas del territorio de la unión de Lakshadweep, un archipiélago frente a la costa suroeste de la India.

En la incautación más grande de este tipo , un aviso de los pescadores locales en febrero de 2020 llevó a las autoridades a encontrar 1.716 pepinos de mar por valor de casi 576.912 dólares escondidos en los arrecifes de coral cerca de Suheli, una isla deshabitada.

Al darse cuenta de la gravedad de los crecientes niveles de delincuencia en torno al comercio, las autoridades locales han intensificado su respuesta. En febrero de 2020 se creó la primera área de conservación de pepinos de mar del mundo en Lakshadweep, se establecieron bases contra la caza furtiva en todas las islas y se formó el grupo de trabajo de protección de pepinos de mar de Lakshadweep con la ayuda de la Oficina Central de Investigación de la India.

Pero a medida que la mayor parte del comercio ilícito continúa ingresando de contrabando en Sri Lanka, detener la cadena de suministro criminal se convierte en un imperativo crucial. Sin embargo, también es crucial ayudar a los pescadores cuyo sustento depende de la captura ilegal de pepinos de mar y sensibilizarlos en la importancia de la protección a estos animales.

El mensaje es claro, sin pepinos de mar, el propia mar ese está poniendo en peligro, y esta es precisamente una de las razones por las que su precio es tan alto y son tan apetecidos.