Alrededor de 400.000 personas necesitan apoyo o protección tras huir de la erupción de un volcán y de una ola de réplicas en el este de la República Democrática del Congo, informó el viernes Naciones Unidas.
Al menos 31 personas murieron cuando el monte Nyiragongo envió un muro de lava hacia la ciudad de Goma el sábado, destruyendo 3.000 casas en el camino y cortando un camino importante utilizado para llevar ayuda humanitaria a una región desgarrada por los conflictos.
La lava se detuvo justo antes de los límites de la ciudad, pero miles de personas más huyeron el jueves temprano cuando el gobierno advirtió que el volcán, uno de los más activos del mundo, podría entrar en erupción de nuevo.
Muchos escaparon a Sake, una ciudad a 20 km al noroeste de Goma que es propensa a los brotes de cólera, dijo el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).
“Ante el aumento del riesgo de un brote de cólera, pedimos ayuda internacional urgente para evitar lo que podría ser una catástrofe para los niños”, dijo el representante de UNICEF en la República Democrática del Congo, Edouard Beigbeder.
Las autoridades emitieron una orden de evacuación alrededor de la 1 de la madrugada, hora local del jueves, después de que las imágenes del radar mostraran el flujo de roca fundida bajo Goma.
El movimiento del magma provocó grietas en la superficie y cientos de terremotos, lo que podría permitir que saliera a la superficie en una nueva erupción, dijo el Observatorio del Volcán de Goma (OVG, por sus siglas en francés).
Reuters