Melanie Janine Brown, más conocida como Mel B envió a principios de 2017 un comunicado en el que anunciaba su divorcio con el productor Stephen Belafonte después de más de diez años de relación. Según explicó en un principio la cantante, la separación se producía por “diferencias irreconciliables”, sin embargo pocos meses después se descubrió que la artista había solicitado una orden de alejamiento para ella sus hijos de su expareja, al que acusaba de haberla pegado desde el primer año de matrimonio, de haberla obligado a hacer tríos con otras mujeres y de haber mantenido una relación amorosa con su niñera, a la que dejó embaraza. A pesar de que Stephen Belafonte quería tener el hijo, finalmente la niñera abortó y ella tuvo que indemnizarla con 300.000 dólares por “servicios extra”, tras lo cual la despidió.
Por ABC
Ahora y gracias al movimiento ‘Me Too’, la cantante ha desvelado la cantidad de abusos físicos y psíquicos que sufrió a lo largo de sus diez años de matrimonio. En una entrevista con el diario ‘The Guardian’, Mel B ha recordado el episodio más duro de su vida. “Era mi deber mentir porque en mi mente no había salida. Estás viviendo una pesadilla y luego le dices al mundo que todo está bien porque estás muy avergonzada, estás plagada de culpa y preocupada de que nadie te crea”, dijo. “El abuso fue dirigido a mí, nunca a mis hijos. Pero, obviamente, mis hijos escucharon y vieron cosas”, añadió.
Melanie Brown intentó dejar a su exmarido en numerosas ocasiones, sin embargo no pudo porque “me amenazaba con violencia, con destrozar mi vida, mi carrera y llevarse a mis hijos”. La pareja, contrajo matrimonio en 2007 y juntos tienen una hija: Madison, de nueve años. Por su parte, la cantante tiene una hija de 21 años fruto de su primer matrimonio con Jimmy Gulzar, y una niña de 13 años, con el actor Eddie Murphy, que tuvo que reconocer la paternidad de la pequeña tras años de lucha en los tribunales.