El Tribunal Décimo de Control del Zulia, a cargo de la jueza María de los Ángeles Ruiz Rivero, dejó preso, a solicitud de una fiscal, a cinco dirigentes sindicales que reclamaban por el cumplimiento de condiciones laborales “en una obra en el CC Delicias Norte, específicamente en Tiendas Total, propiedad de un ciudadano de nacionalidad árabe con nombre Jarut”, en Maracaibo, estado Zulia, dice la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores de la Ciudad, el Campo y la Pesca de Venezuela (CSBT). El contratista de la empresa llamó a las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES), que se los llevaron preso, los presentaron ante el Tribunal y la fiscal los imputó por agavillamiento y asociación para delinquir.
SEBASTIANA BARRÁEZ // INFOBAE
Uno de los detenidos, el 25 de mayo de 2021, es Luis Ramón Valles Núñez (55 años), jefe sindical nacional de la organización política Izquierda Unida, además es Secretario General de la Federación Nacional Bolivariana de la Industria de la Construcción (FENACTS) y Vicepresidente de la Central Bolivariana Socialista de los Trabajadores en el estado Zulia.
En el sector construcción Valles Núñez está enfrentado a Marco Tulio Díaz, ex constituyente y vicepresidente de la Central Bolivariana y Socialista de Trabajadores. Los ahora detenidos reclamaban las condiciones en las que están laborando los trabajadores de una contratista que ejecuta una obra para la Gobernación del Zulia, sin las requeridas medidas sanitarias ante el COVID-19, sin la dotación de equipo apropiado para el trabajo y de botas y uniformes de seguridad.
Aunque Nicolás Maduro se pregona como “presidente obrero”, nunca antes hubo tantos dirigentes presos, con sus derechos humanos vulnerados, lanzados en sitios infrahumanos, lejos del lugar donde tienen a su familia, sin cumplimiento al debido proceso, con jueces y fiscales que presionan a los detenidos para que asuman los hechos porque de lo contrario no les hacen el juicio.
En el caso del Zulia, el conflicto se acrecienta el 25 de mayo de 2021 cuando el equipo de Vallés conversa con los representantes de la empresa, quienes se niegan a cumplir con los trabajadores. El empresario llama por teléfono a alguien y de inmediato llegó una comisión de las FAES y se lleva al grupo de sindicalistas: además de Vallés se llevan a José Asunción Guerrero del Sindicato de la Construcción del Zulia (Sitraconsafrazul), Richard Eduardo Ortega Castro del Sindicato de la Reserva (Fenatxs), Jean Carlos Bracho Navarro del Sindicato Único de Trabajadores de la Industria de la Construcción del Zulia (Suticez) y Eduardo José Barroso Montiel (Funtbcac).
La justificación del patrono es que los sindicalistas pretendieron extorsionarlo, pero el Tribunal no encontró elementos para la acusación. El fiscal, por su parte, dijo que hubo agavillamiento y asociación para delinquir, razón por la cual pidió privativa de libertad. “Denunciamos que estamos en presencia de la descarada criminalización de la lucha sindical, calificando de ‘agavillamiento’ el justo reclamo ante las violaciones patronales y ‘delito’ la legítima asociación para la defensa de los derechos laborales”, dijo en un comunicado la Central Unitaria de Trabajadores de Venezuela (CUTV) y el Frente Nacional de Lucha de la Clase Trabajadora (Fnlct), quien considera de inescrupuloso al empresario de origen árabe.
Muchos sindicalistas detenidos
El grupo de jóvenes, “trabajadores y dirigentes sindicales del movimiento revolucionario bolivariano”, agrupados en torno al periódico Lucha de Clases, dijeron que la detención de los cinco sindicalistas “se suma a las más de cien detenciones arbitrarias de trabajadores, efectuadas en los últimos años” y agregaron que “el gobierno funge como furioso guardián y protector del enriquecimiento de las clases dominantes, aún y a costa del sufrimiento de la clase trabajadora que acude a su faena diaria en las peores condiciones de bioseguridad, y sin cumplimiento alguno de las contrataciones colectivas, cuando existen”.
Además de exigir justicia y debido proceso para los sindicalistas detenidos, hicieron un llamado “a nuestros hermanos de clase obrera a cerrar filas, a organizarnos, unirnos y formar un solo puño, para enfrentar las embestidas de la nueva capa burguesa incrustada en el poder, que otorga concesiones a burguesa tradicional y ampara al patrón empresarial explotador, para que exprima cada día más a los trabajadores y trabajadoras. Nuestro enemigo real es de clase, y por lo tanto la salida a la crisis actual tiene que ser revolucionaria”, finalizan diciendo.
No es el primer caso contra sindicalistas: desde hace 10 años está preso el dirigente de Ferrominera, Rodney Álvarez.
Los dirigentes sindicales presos en Zulia se suman a la cantidad de líderes obreros presos por el régimen venezolano, entre quienes está Eudis Girot y otros de la industria petrolera.
Fue FAES
Así mismo Izquierda Unida (IU) se pronunció calificando de “muy grave e irregular situación de violación al derecho a la actividad sindical y judicialización de las luchas obreras”, lo sucedido contra el Coordinador General Nacional de Luchas Obreras y Actividades Sindicales, Luis Valles, quien también es miembro de la Dirección Política Nacional de Izquierda Unida, y contra los otros cuatro dirigentes.
Calificaron su detención de “burda maniobra, dónde integrantes del FAES, a solicitud de un empresario amigo de la Gobernación del Zulia, procedieron a Aprehenderlos mientras cumplían con sus labores de Líderes Sindicales, sin pruebas hasta ahora de ningún tipo, sólo por el simple hecho que los Directivos Sindicales, se encontraban en los alrededores de una Obra en Construcción con la intención de brindarle apoyo y exigir el cumplimiento del contrato colectivo de la construcción, a los trabajadores”.
“Estos empresarios, que tienen a los trabajadores laborando sin cumplir con las Normas de Seguridad e Higiene Industrial y con lo establecido en el contrato colectivo de la construcción, lo que hicieron fue pagar a una Comisión del FAES para que se llevara detenidos a todos nuestros Dirigentes Políticos, Sindicales y Sociales”.
A juicio de IU “se sigue mostrando el pacto del gobierno con los sectores patronales y con la burguesía transnacional. Exigimos que se haga Justicia en favor de nuestro compañero Luis Valles y de todos los que están detenidos con él”, dicen.
“Algunos funcionarios policiales mal pagados son lanzados a las manos de empresarios inescrupulosos, y usados para acosar a la dirigencia obrera en plena pandemia y con este desastre económico. No estamos dispuestos a permitir, ni de aceptar este tipo de atropellos y vejámenes contra nuestra dirigencia sindical”.
Dirigiéndose a Nicolás Maduro y a Tarek Williams Saab les piden asumir “su condición de garantes de la Ley, pónganse coto a ésta situación tan delicada contra la dirigencia obrera. Les exigimos igualmente que giren instrucciones para que orienten a los Cuerpos Policiales a que ataquen a los verdaderos delincuentes, que dejen el miedo y vayan a detener a los pranes que controlan amplios territorios de nuestros barrios, que vayan a detener a los especuladores hambreadores del pueblo y de la clase obrera en general, y que no se sigan prestando para atacar y criminalizar a la dirigencia obrera”.
“Señor Presidente, señor Fiscal recuerden ustedes, que alguna vez pertenecieron a esa clase obrera, esa que ustedes tienen sumida en la miseria, desde Izquierda Unida exigimos respeto para las Luchas Sindicales, en nuestra Patria. No aceptamos su doble discurso de denunciar los atropellos del dueto Duque-Uribe en Colombia, al tiempo que aquí cometen las mismas o peores tropelías contra los luchadores obreros, campesinos, comuneros y populares”.
“Para finalizar convocamos a todas las fuerzas Sindicales del país, y en especial a aquellas que nos acompañan en la APR (Alternativa Popular Revolucionaria) a denunciar ante el mundo los atropellos vividos por la clase trabajadora venezolana, y a expresar su solidaridad con todos los dirigentes sindicales encarcelados”.
Hay que destacar que la Central Bolivariana Socialista de Trabajadores de la Ciudad, el Campo y la Pesca de Venezuela (CSBT) asegura que “en el estado Zulia con el surgimiento de nuevos grupos económicos es común ver en supermark, locales comerciales, empresarios custodiados por funcionarios del FAES y Policías Regionales. Estableciendo relaciones inicuas entre el capital y las instituciones de seguridad del estado”.