El ex referente del Manchester United, Wayne Rooney se vio envuelto en un escándalo durante el fin de semana y su rostro acaparó gran cantidad de portadas de los principales medios deportivos ingleses después de que se filtraran fotos suyas durante una fiesta privada en Inglaterra.
Por: Infobae
El ahora entrenador del Derby County de la segunda división del fútbol inglés, que está casado desde el 2008 y tiene cuatro hijos, quiso disculparse tanto con su familia como con el club al que pertenece después de sumar su primera victoria de la pretemporada ante el Betis.
“Cometí un error. Fui a una fiesta privada con dos de mis amigos y en lo que a mí respecta, me gustaría pedir disculpas a mi familia y al club por las imágenes que han estado circulando y quiero seguir adelante”, se lamentó en diálogo con Sky Sports tras el triunfo por 1-0 frente a los españoles.
“Estoy agradecido al Derby County por darme la oportunidad de tratar de devolverle a donde pertenece (Primera División), y haré todo lo que esté en mis manos para lograrlo. No quiero comentar más sobre el asunto. Está arreglado. Tengo muchas ganas de mirar al futuro y prepararme para el próximo partido”, sentenció el ex delantero de 35 años.
Según detallaron los medios británicos, antes de que hiciera estas declaraciones, las jóvenes que estaban implicadas (Tayler Ryan, Elise Melvin y Brooke Morgan) se habrían reunido con los abogados de Rooney para entregarle todas las fotografías que habían tomado aquella noche a cambio de un precio simbólico de una libra. Al parecer, los agentes habían hecho una denuncia por chantaje que finalmente terminaron retirando.
Además, también le habrían enviado una disculpa por escrito en la que mostraban su total “arrepentimiento” por toda la repercusión que se generó en el ambiente.
La prensa local, tras consultar con algunas fuentes cercanas, también informó que su esposa Coleen apoya la versión de su marido, en la que asegura haber sido víctima de un intento de difamación. El club, por su parte, tampoco tomó medidas drásticas y seguirá apostando por la continuidad de su entrenador.
Todo ocurrió en la noche del sábado, después de que su equipo sufriera su segunda derrota en un partido de pretemporada ante el Salford por 2-1. Junto a algunos amigos, el ex futbolista acudió a una fiesta dentro del exclusivo club Chinawhite de Manchester.
Allí, en su stand VIP, conocieron a un grupo de tres chicas que estaban celebrando el cumpleaños número 21 de una de ellas. Al término, Rooney y sus compañeros decidieron acompañarlas al hotel donde se alojaban y todo parece indicar que los festejos continuaron.
En medio de la celebración, las jóvenes comenzaron a tomar fotos. En un primer momento se pudo ver al inglés con los ojos medio nublados junto a una de ellas. Pero las bromas empezaron cuando el británico decidió dormirse vestido en una de las sillas. A partir de ese momento, las jóvenes aprovecharon para tomarse fotos junto a él.