Una joven madre de Georgia que estaba en una bañera con su hijo pequeño tomó drogas y se quedó dormida, lo que provocó que el bebé se ahogara, dijeron las autoridades.
Por New York Post
Anslie Nicole Brantley, de 19 años, fue arrestada el viernes por cargos de asesinato en segundo grado y crueldad hacia los niños por la muerte de su hijo el 9 de junio en una casa en el condado de Coweta, dijeron funcionarios del alguacil el lunes.
Los agentes dicen que respondieron a la residencia y encontraron a un niño que no respondía y que luego murió en un hospital. Más tarde, los investigadores se enteraron de que Brantley “había tomado drogas” y se quedó dormida en la bañera, matando a su hijo en el proceso.
“El bebé estaba en la bañera con ella y no respondía cuando se despertó”, dijo la Oficina del Sheriff del condado de Coweta en un comunicado.
El niño de 10 meses, cuyo nombre no ha sido revelado, fue descubierto frío al tacto por los investigadores, informó el Newnan Times-Herald .
Las autoridades también encontraron metanfetamina en la casa propiedad de la madre de Brantley, Kelli Gordon, de 36 años, quien fue arrestada por cargos de posesión de narcóticos. Permaneció en una cárcel del condado por cargos no relacionados con la muerte de su nieto, informó el periódico.
Cinco de los otros hijos de Gordon fueron puestos bajo la custodia de funcionarios de bienestar infantil luego de su arresto, dijeron las autoridades.
Los resultados de toxicología tanto de Brantley como de su hijo estaban pendientes el lunes, informó el Times-Herald.
Brantley fue detenido sin incidentes en Alamo, Georgia, a unas 160 millas del condado de Coweta. Ella permanece detenida sin derecho a fianza, informó el Atlanta Journal-Constitution . No está claro si ha contratado a un abogado que pueda hablar en su nombre.
Un perfil de Facebook de Brantley, de Newnan, la identifica como una “mamá de Draiden”. Ella actualizó su cuenta en octubre con una foto de un bebé.
“El chico dulce de Nana”, decía una respuesta.