El 47,5% de los 1,05 millones de venezolanos que migraron a Perú en los últimos años tiene un nivel educativo universitario o técnico ya completado, lo que representa un alto potencial de aporte económico, fiscal y productividad en esa nación suramericana, revela un reciente estudio.
Por Gustavo Ocando Alex / vozdeamerica.com
Una investigación de la Cámara Venezolana Peruana y la fundación alemana Konrad Adenauer-Stiftung (KAS) precisó que 27,8% de los migrantes venezolanos en Perú, todos mayores de 18 años, completó su educación universitaria, mientras 16,3% de ellos culminó estudios técnicos superiores y 3,4% realizó maestrías o postgrados en su carrera académica.
El estudio se fundamenta en una encuesta de 2020 del centro de pensamiento Equilibrim CenDe y subraya la potencialidad de esa población migrante en comparación con los niveles educativos de quienes son oriundos de Perú.
Los peruanos mayores de edad residentes en zonas urbanas que cuentan con estudios superiores universitarios o técnicos completos representan el 21,7% de la población de su país, según el Instituto Nacional de Estadística e Informática.
La docencia, con 16,8%, y la administración, con 15,4%, son las carreras universitarias y técnicas más estudiadas por esos venezolanos que se han movilizado al Perú en los años más recientes, de acuerdo con el estudio.
Les siguen enfermería (7,3%); ingeniería informática (5,9%); finanzas y contabilidad (5,3%); derecho (3,4%) y comunicación social (2,8%). También, se mencionan a formados en medicina, ingeniería civil, relaciones laborales, publicidad y relaciones públicas, ingenierías eléctrica y mecánica, y psicología.
David Licheri, directivo e investigador de Equilibrium, detalló el aumento fugaz de la migración venezolana a Perú en los últimos tres años: en 2018, se calculaban en 33.000 migrantes; se piensa que hoy hay 1.050.000, lo que lo convierte en el segundo mayor país receptor de venezolanos, tras Colombia.
Impacto fiscal positivo
Licheri enfatizó en el aporte fiscal que ha dejado positivamente a Perú la población migrante venezolana: esa movilización generó un ingreso al Estado peruano de 471 millones de soles en 2020 (115,4 millones de dólares).
El impacto fiscal neto en positivo fue de 139 millones de soles o 34 millones de dólares, precisó Licheri. Esos recursos podrían ser útiles para construir 1.500 viviendas de interés social o 70 escuelas públicas, o para comprar 305 kits para unidades de cuidados intensivos o 3.301 ventiladores mecánicos, indicó.
Y ese impacto fiscal podría elevarse hasta 658 millones de soles o 161 millones de dólares al año, indicó. Es necesario para ello vencer las barreras de la inclusión venezolana en Perú, dijo, entre las que mencionó las restricciones para contratar extranjeros, reconocer sus grados y títulos académicos, constituir empresas, incluirlos en el sistema financiero y la discriminación.
Nancy Arellano, directora de la organización Veneactiva, especialista en gestión pública y finanzas internacionales, precisó que el Banco Mundial ha calculado que la educación de los venezolanos que están en Perú representa una inversión global de 3.000 millones de dólares. Advirtió que esta nación puede aprovechar a los migrantes especializados en educación, ante su propio déficit de docentes.
Puso como ejemplo que se calcula que en Perú hay un déficit de 40.000 profesores en educación física y, entre los migrantes venezolanos, existen 9.000 personas con estudios en ello. Puntualizó que está en marcha “un proceso de integración innegable e imparable” entre Venezuela y Perú, que debe atenderse.
Uno de los panelistas de la presentación del estudio llamó a aprovechar inmediatamente las oportunidades económicas que se generan de la recuperación del producto interno bruto de Perú. “Hay que trabajar paralelamente, no esperar cambios en políticas públicas”, apuntó Oscar Guzmán, directivo del Consejo Mundial de Cooperativas.
Detalló que la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo, USAID por sus siglas en inglés, ha aportado recursos para la capacitación y acompañamiento de un “ecosistema emprendedor” entre los venezolanos en Perú. También, se ha procurado que los migrantes se integren al sistema financiero nacional y que haya “sostenibilidad” de los proyectos a mediano y largo plazo.
La inclusión de venezolanos en la economía y la sociedad peruanas se antoja como “un proceso desafiante” para su Estado y ciudadanía, dado que este país no ha experimentado nunca antes “un flujo tan dramático” de migrantes como el de estos tiempos, advirtió, por su parte, el doctor en filosofía y coordinador de proyectos de la Fundación Konrad Adenauer, Andrés Hildrebant.
Perú fue un país emigrante durante el siglo XX y Venezuela, en su momento, tuvo una respuesta “tan generosa” con sus ciudadanos, resaltó.
“La migración venezolana es un fenómeno nuevo que debe ser enfrentando con una actitud correspondiente”, consideró, en la presentación del estudio.