Choque de ancla contra un oleoducto podría ser la causa del vertido de petróleo en California

Choque de ancla contra un oleoducto podría ser la causa del vertido de petróleo en California

El derrame de petróleo forzó el cierre de las playas de la ciudad y el estado, comenzando desde el extremo norte de Huntington Beach hasta aproximadamente 6 millas al sur hasta el embarcadero del río Santa Ana. David McNew / AFP a través de Getty Images

 

Las imágenes de peces muertos y pájaros bañados en la espesez del crudo no han tardado en dar la vuelta al mundo. Las playas de lugares tan exclusivos como Laguna y Newport Beach han echado el cierre hasta nuevo aviso -podrían ser semanas antes de que vuelvan a abrirse al público- y la mancha en el agua tiene un tamaño superior a Alcobendas, en otro desastre natural de gran calado para la historia de California. El vertido de crudo desde una plataforma petrolífera que comenzó el sábado frente a Huntington Beach ha arrojado hasta el momento 476.000 litros de petróleo al mar mientras se investigan las causas.

Por El Mundo





La compañía detrás de la crisis, la texana Amplify Energy, cree que podría haber sido el ancla de un gran buque de carga el que golpeó contra el oleoducto causando la catástrofe, aunque no han llegado a una conclusión definitiva. “Hemos examinado 8.000 pies -unos 2.500 metros- de oleducto y hemos aislado un área de interés específico”, indicó Martyn Wilsher, el CEO de la empresa.

La empresa planeaba enviar buzos para verificar el punto exacto de la fuga que detectaron horas antes con máquinas, a unos 8 kilómetros de la costa de Huntington Beach, un vertido que de momento se ha detenido, de acuerdo a las autoridades el domingo.

Sin embargo, el daño ya está hecho. Katrina Foley, supervisora del condado de Orange, indicó que el accidente “ha devastado la línea costera y está teniendo un impacto tremendo en nuestras reservas ecológicas además de en las económicas”. Foley se refirió a la devastación causada por el crudo en los humedales de Talbert Marsh, una zona en la que había trabajado con el Cuerpo de Ingenieros del ejército de Estados Unidos para preservar la fauna y la flora durante décadas y que ha quedado “completamente destruido en un solo día”.

Es una situación que los grupos ecologistas en California venían advirtiendo desde hace años, no solo preocupados por las plataformas petrolíferas y las extracciones offshore sino por el alto tráfico de cargueros, que las autoridades creen que podrían haber producido la mancha. El incidente se produjo en un oleducto que une el puerto de Long Beach, el segundo más grande de EEUU, con una plataforma conocida como Elly.

Pese a los esfuerzos de la Guardia Costera y del resto de autoridades del condado para salvaguardar las playas, la flora y la fauna de la zona, se espera que el vertido siga manchando la arena de la costa en los próximos días. Las playas de Laguna Beach siguen cerradas y se ha prohibido cualquier tipo de actividad pesquera, incluyendo los crustáceos.

Hasta el domingo la Guardia Costera había logrado retirar casi 12.000 litros de crudo del agua, apoyados por una flota de barcos y cuatro aviones sobrevolando constantemente la zona.

No es la primera vez que Huntington Beach sufre las consecuencias de una catástrofe ecológica de esta naturaleza. En 1990 el vertido superó el millón y medio de litros después de que se rompiera el casco de un petrolero. En 1969, la devastación fue aún mayor cuando el estallido de uno de los pozos petrolíferos desembocó en un desastre medioambiental en Santa Bárbara. Y en el recuerdo, las catástrofes titánicas del Exxon Valdez en Alaska y la del Deepwater Horizon en el Golfo de México.