En el estado Nueva Esparta fueron instaladas 11 plantas de tratamiento para evitar que las aguas residuales sean vertidas, sin recibir el debido tratamiento, a las riberas de las costas de la región insular.
Por: Dexcy Guédez / Corresponsalía LaPatilla.com
Orlando Ávila Guerra, diputado a la Asamblea Nacional por Nueva Esparta, enumeró que existen plantas de tratamiento en Dos Cerritos, Aricagua, Juangriego, Los Bagres, Punta de Piedras, Boca del Río, San Pedro de Coche, La Isleta, La Guardia, El Cardón y El Yaque, pero todas están en condiciones precarias y ninguna de ellas se encuentra totalmente operativas.
El parlamentario recordó que en 2015, el gobierno central anunció la puesta en funcionamiento de la planta de tratamiento de aguas servidas Dos Cerritos, en el municipio Maneiro, mediante el convenio China-Venezuela.
A pocos meses de haber sido rehabilitada con una inversión de 68,8 millones de bolívares, la principal de las 11 plantas de tratamiento existentes en el estado Nueva Esparta, dejó de recibir el mantenimiento necesario y, en consecuencia, comenzó a sufrir un deterioro indetenible.
La delincuencia terminó por desvalijar los equipos y hoy prácticamente está inoperativa, por lo que las aguas están siendo lanzadas crudas al mar, afectando el ecosistema costero de los municipios Maneiro, Arismendi y Antolín del Campo.
Ávila Guerra alertó que la diversidad y los ecosistemas marinos de las islas de Margarita, Coche y Cubagua, son altamente frágiles y cualquier descompensación ocasiona daños, muchos de ellos irreversibles o de muy lenta recuperación.
Recalcó que es obligatorio que haya un sistema de aguas servidas en pleno y óptimo funcionamiento para evitar la contaminación de los ecosistemas marinos, pero las autoridades nacionales y regionales ligadas al régimen de Nicolás Maduro han hecho caso omiso ante tal necesidad.
Antes todo funcionaba
El diputado neoespartano refirió que en la década de los 90 fue instalado el primer colector de aguas servidas Dos Cerritos para proteger el eje costero Porlamar-Pampatar. Esa planta trataría las aguas negras recolectadas y después del tratamiento servirían para regar sembradíos y jardines de las diferentes avenidas de Margarita.
Ávila Guerra recordó que entre los años 2003 y 2004, la isla de Margarita contaba con un 90% de sus aguas residuales tratadas, gracias a la operatividad de 11 plantas de tratamiento, cumpliendo con la finalidad para la que fueron instaladas.
“Actualmente ninguna de esas plantas está funcionando al 100%. Incluso, casi todas están apagadas totalmente o sencillamente desmanteladas”, expresó el parlamentario. Acotó que el Colegio de Ingenieros del Estado Nueva Esparta elaboró un informe que corrobora la inoperatividad de los sistemas para tratar las aguas residuales.
La desidia chavista
El parlamentario de la AN recordó que el 5 de junio de 2003, para la celebración del Día Mundial del Ambiente, el expresidente Hugo Chávez visitó la isla de Margarita para inaugurar la planta de tratamiento de Aricagua, municipio Antolín del Campo, una de las más importantes plantas de tratamiento de la región dada la gran extensión costera que posee esa jurisdicción.
En esa oportunidad, el fallecido mandatario alertó que “las aguas negras, aguas sucias, aguas servidas caen al mar contaminando las playas o se van a tierra firme contaminando y produciendo cólera, enfermedades, amibiasis, diarrea, mortalidad infantil”. Resaltó que con la inauguración de ese colector se estaría tratando más del 90% de las aguas servidas de las islas de Margarita y Coche. Pero sus palabras “se las llevó el viento” cuando hoy se corrobora que esa planta está fuera de operaciones.
En 2006, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales anunció otra inversión por el orden de los 70 mil millones de bolívares (32,6 millones de dólares), a través de la Hidrológica del Caribe (Hidrocaribe), responsable del sistema de aguas servidas en esta zona del país.
Abandono total
La directora del Ministerio de Ecosocialismo en el estado Nueva Esparta, Nataly Verde, reconoció hace dos años que de las 11 plantas de tratamiento de la región insular, solo ocho estaban operativas, pero funcionando solamente en un 45% como consecuencia de la falta de reposición de equipos.
También Alfredo Arvelo, coordinador de Residuos y Desechos de ese ministerio, ratificó que la mayoría estaba operando a media máquina. No obstante, confiaba en un acuerdo con PDVSA para su recuperación, lo cual nunca se concretó.
Desde el año 2017, expertos de la Comisión de Evaluación de los Servicios de Agua potable y Saneamiento del Colegio de Ingenieros del estado Nueva Esparta, vienen haciendo seguimiento a la situación. Para febrero de este año, volvieron a dar cuenta del total abandono en que se encuentran las plantas de tratamiento y estaciones de bombeo de aguas servidas de la entidad neoespartana.
Detalles del informe
La Comisión de Evaluación de los Servicios de Agua Potable y Saneamiento realizó un diagnóstico de la situación de las plantas más afectadas y se ha identificado en cada caso las necesidades más inmediatas, así como aquellas que requieren acciones a mediano y largo plazo.
Los resultados de ese diagnóstico indican que la situación sanitaria-ambiental es grave, toda vez que todos los sistemas, exceptuando la planta de tratamiento de El Yaque por ser la más nueva, presentan fallas importantes en su funcionamiento que van desde casos en que están completamente inoperativas hasta aquellas plantas en las cuales fallan algunos de los componentes o etapas del sistema que no garantizan el cumplimiento de las normas de descargas de efluentes a los cuerpos de agua, debido a la disminución de la calidad del distributario.
Todas las soluciones redundan en la necesidad de inversión de una importante cantidad de recursos en reparación de equipos y adquisición de repuestos, así como la implementación de planes de operación y mantenimiento preventivo y correctivo, ya que esos esfuerzos e inversiones serán inútiles si se continúa operando en la forma en que se está haciendo en la actualidad, es decir, sin un adecuado plan de inversiones en obras nuevas, rehabilitación y ampliación, así como inversiones en capacitación y creación tanto de un almacén que garantice un stock de repuestos, así como un banco de proyectos para atacar los problemas o necesidades.
“El informe del gremio de ingenieros precisa que el sistema de recolección y disposición de aguas negras de la entidad está prácticamente inoperativo, tanto por personal calificado, desinversión, como por el desmantelamiento progresivo a manos de la delincuencia”, apuntó el parlamentario.
Indicó que el informe alerta que de no corregir la situación, graves problemas de contaminación amenazan las playas de las islas de Margarita y Coche, así como los cuerpos de agua natural, sumando los problemas de insalubridad que puede producir en las comunidades.
Detalla el informe que las estaciones de ese servicio no poseen las condiciones para que los trabajadores se mantengan en esos sitios, toda vez que carecen hasta de electricidad. Por eso algunos de los trabajadores han sido víctimas de atraco, mientras que otros han desertado de la Hidrocaribe por sus bajos salarios y la eliminación de beneficios sociales.