Con anterioridad denunciamos la situación. Advirtió Vente Venezuela la vagabundería. Se dijo con pelos y señales lo que ocurriría. Sin embargo, este socialismo repitió las dosis y todo el tratamiento de siempre. No tienen derecho quejarse quienes concurrieron bajo condiciones tan adversas. Muy pocos lo hacen con ingenuidad. Muchísimos con la malicia de meterse, al menos, unos reales constantes y sonantes. Entonces, esa quejadera es melodrama.
Esa quejadera es parte del libreto. Con los bolsillos llenos, tienen el tupé de inculpar a la ciudadanía que no concurrió a las urnas. No se abstuvo, porque estas no fueron elecciones. La ciudadanía no se prestó a la fanfarronería de un simulacro electoral. Nicolás contó con los negociadores de México para ponerle la guinda a la torta. E hicieron fiesta a costa de la desgracia de todos los venezolanos, Estafa, al fin y al cabo, se burlaron otra vez de la buena fe de los venezolanos.