El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) anunció este jueves que había logrado reunir a 100 niños migrantes (en su mayoría centroamericanos) que habían sido separados de sus padres por la Administración Trump, cuando cruzaron la frontera de manera irregular.
El Gobierno que preside Joe Biden también anunció que ya está en proceso de reunificar a otras 350 familias separadas en la frontera, como parte de su esfuerzo por resarcir el daño humanitario causado por las políticas migratorias de su antecesor.
“Me hubiese encantado que esto hubiese sucedido mucho antes. Pero estamos teniendo progreso y creo que estamos ganando impulso”, dijo a la agencia de noticias The Associated Press la directora ejecutiva del Equipo de trabajo de la Administración para reunificar a las familias migrantes, Michelle Brané.
En su primer día en la Casa Blanca, Biden prohibió la separación familiar y promulgó una orden ejecutiva para reunir a las familias separadas por Trump, quien implementó una política para disuadir a los migrantes que fue muy criticada por su impacto en la salud física y mental de los niños y padres afectados.
Alrededor de 5,500 niños fueron separados por la fuerza de sus padres durante el mandato de Trump, sobre todo en 2018. Su Administración llevó a juicio a muchos migrantes que cruzaron la frontera sin autorización, incluso si estos estaban pidiendo el asilo, un derecho según las leyes estadounidenses y los tratados internacionales. Mientras los adultos eran detenidos en prisiones para ser enjuiciados, a los niños se les trasladaba a albergues.
Tras una lluvia de críticas, Trump canceló la política de separación en junio de 2018.
Los funcionarios de la Administración Biden calculan que todavía hay unos 1,150 niños que fueron separados y de los que el Gobierno no conoce su paradero.
Las autoridades han creado la página web Juntos.gov para ayudar a las familias migrantes separadas por Trump a reunificarse.