Por segunda vez en una década, California enfrentará restricciones obligatorias que rigen el uso de agua al aire libre.
Por Univision
Esto se da mientras el estado padece otra sequía y los esfuerzos voluntarios de conservación se han quedado cortos.
Las reglas adoptadas el martes por la Junta Estatal de Control de Recursos Hídricos incluyen no regar el césped durante 48 horas después de una tormenta o dejar que los aspersores corran sobre la acera.
Estas restricciones podrían entrar en vigor hacia fin de mes.
Las personas que violen estas medidas podrían enfrentar multas diarias de $500, aunque los reguladores dicen que esperan que tales multas sean raras, como lo fueron en la última sequía.
California no deja de gastar agua
La acción se produce cuando los californianos no han cumplido con el llamado del gobernador Gavin Newsom de una reducción voluntaria del 15% en el uso de agua en comparación con el año pasado.
Entre julio y noviembre, el consumo de agua del estado se redujo solo un 6%.
Las nuevas restricciones siguen a un diciembre extremadamente húmedo.
Pero los patrones climáticos se han vuelto más impredecibles debido al cambio climático y el climatólogo estatal Michael Anderson dijo que los pronósticos muestran que enero, febrero y marzo podrían ser más secos que el promedio.
Ayuda la lluvia, pero aún falta
Los pronósticos anteriores no predijeron un diciembre tan húmedo, que registró cantidades récord de lluvia y nieve en muchas áreas.
A mediados de diciembre, alrededor del 80% del estado se encontraba en condiciones de sequía extrema o excepcional.
A fines de mes, solo alrededor de un tercio estaba experimentando esas condiciones, según el monitor de sequía de Estados Unidos.
El Departamento de Recursos Hídricos del estado anunció el martes que las tormentas recientes permitirán la reanudación de la generación de energía hidroeléctrica en la presa de Oroville, que se detuvo a principios de agosto debido a niveles históricamente bajos.
A pesar de la lluvia, partes significativas del sistema de agua del estado todavía están bajo estrés debido a las condiciones extremadamente secas a principios de 2021 que dejaron caer muchos de los embalses más grandes de California a mínimos récord y casi récord.
Norte de California ahorra más agua que el sur
El norte de California estaba más húmedo que el sur de California en noviembre y conservaba significativamente más agua.
Las regiones al norte del río San Joaquín, incluidos Sacramento y San Francisco, utilizaron entre un 17% y un 26% menos de agua que en noviembre de 2020, mientras que los condados de Los Ángeles, Orange y San Diego, que representan el 55% de la población del estado, utilizaron casi un 1% más, según datos estatales.
¿Cuáles son las nuevas restricciones en el uso del agua en California?
Entre los usos del agua que no se permitirán bajo las nuevas reglas están:
-Se prohíbe el riego al aire libre que resulta en un escurrimiento excesivo hacia las calles y aceras.
-Usar agua para jardinería y riego durante las 48 horas posteriores a las tormentas que traen al menos 0,25 pulgadas (0,63 centímetros) de lluvia.
-Lavar coches con mangueras sin boquillas de cierre.
-Usar agua potable para lavar caminos de entrada, aceras, edificios y patios y para la limpieza de calles o para llenar fuentes decorativas o lagos.
Excepciones en las restricciones al uso del agua en California
Hay algunas excepciones en las nuevas restricciones al uso del agua en California, como por ejemplo que los árboles de las calles se pueden regar, pero el césped no.
Estas reglas entrarán en vigor una vez que se completa una revisión administrativa.
California adoptó restricciones similares durante la sequía de cinco años que terminó en 2017, y algunas ciudades y distritos de agua locales las hicieron permanentes.
Tales restricciones eran solo una parte del enfoque de conservación del estado, que también incluía incentivos para que los californianos destruyeran céspedes hambrientos de agua en favor de jardines resistentes a la sequía.
Multas a la vista, ¿denunciarías a tu vecino?
Aunque las regulaciones incluyen la capacidad de multar a los infractores hasta $ 500 por día, las multas pocas la última vez.
El estado no tiene planes de poner “policías de agua” en las calles, dijo Oppenheimer, pero señaló que durante la última sequía muchos distritos de agua locales reforzaron el personal para monitorear la conservación y el cumplimiento.
El estado también tiene un sitio web donde las personas pueden denunciar a sus vecinos u otras personas que vean que violan las reglas y las quejas se dirigirán a la agencia de agua local correspondiente.
Durante la última sequía de California, la gente se involucró en la campaña “vergüenza por la sequía”, que consistía en denunciar públicamente a las personas que desperdician agua mediante la publicación de videos en redes sociales.