En los últimos años, el modo de consumir contenidos de las familias cambió drásticamente con la aparición de un nuevo invitado en la mesa: Netflix. La plataforma le dijo a los usuarios que ahora podrían consumir lo que quieran y cuando quieran, algo revolucionario. Conforme su éxito fue escalando, la empresa comenzó a financiar y a dirigir producciones propias, las cuales fueron inmensamente populares.
Por: Crónica
Incluso la palabra serie hoy se asocia directamente con el nombre de dicha compañía. Sin embargo, desde el 13 de enero, la serie del momento se encuentra en otro lado, en otra plataforma de streaming. Estamos hablando de “Peacemaker”, la cual se puede encontrar en HBO Max.
De la mano de actores como John Cena y Danielle Brooks, se las arregló para meterse en el interés de los usuarios y ser la nueva temática de conversación en la mesa. Es una suerte de secuela del filme El Escuadrón Suicida, aborda temas como las disfunciones familiares y todo en un tono jocoso. Además, resulta ser la primera ficción ambientada en el Universo Extendido de (UEDC).
Por supuesto que la bandera del proyecto es el ex luchador de WWE, que últimamente es una de las caras más cotizadas de Hollywood. En este papel, personifica a un extremista muy fornido, que tiene un objetivo claro: garantizar la paz a cualquier costo, sin importar cuantas vidas se cobre en el medio.
“Por más terrible que parezca, Peacemaker es lo que se entiende como un hombre común. Un tipo simplón, sumamente básico y bastante ignorante, que forma sus opiniones políticas y sociales en base a memes y discursos televisivos. Pero todas sus creencias, hasta su controvertida idea de masculinidad, serán puestas a prueba durante el transcurso de la serie. Y no van a terminar igual”, señaló el actor al ser consultado por su personaje.
De los cómics al mundo de las series
El Peacemaker no se cayó de un árbol hace unos días, sino que tiene una extensa trayectoria en el ambiente del cómic. Llegó al mundo en 1966, contexto de plena guerra fría y presidencia de Lyndon B. Johnson en los Estados Unidos, encarnado en Christopher Smith, un diplomático dedicado al desarme nuclear que se vuelve un superhéroe. Sus convicciones son firmes, imponer la paz mundial mediante la fuerza y la violencia extrema.
A pesar de la interesante trama, el personaje fue muy taquillero y desapareció un año después. Tiempo después, en 1983, la empresa Charlton Comics (dueña del personaje) vendió todos sus activos a DC Comics, que se encargó de potenciarlos. Luego de varias idas y vueltas con los tintes que iba a tener Peacemaker y tras una previa en lo que fue “Watchmen”, se relanzó su historia en 1988.