Venezuela, entre los cuatro países más caros para comer en Sudamérica

Venezuela, entre los cuatro países más caros para comer en Sudamérica

EFE/ Rayner Peña

 

 

 

El constante aumento de los precios de los alimentos en el mundo comienza a pasar factura en las economías de los países que se han visto golpeados tanto por la pandemia, como por la falta de políticas económicas que reimpulsen los sectores productivos y permitan que los trabajadores tengan mejores ingresos para cubrir sus gastos. Venezuela no es la excepción, y es que durante el 2021 los rubros alimenticios aumentaron cerca del 42%, según publicó en diciembre de ese año el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF).

Para enero del 2022, la situación ha sido aún más compleja, pues los ciudadanos deben enfrentarse a los continuos aumentos con un salario que apenas equivale a 1.5 dólares, en el caso de quienes se desempeñan en la administración pública. Según el OVF, para enero del 2022 la canasta alimentaria se ubicó en $365, es decir, 45,4% más en relación a su valor en enero de 2021, cuando alcanzó los $251.

Según un estudio realizado por Numbeo, cuyo trabajo es comparar los índices del costo de vida de los diferentes países del mundo, estima que Venezuela se ubica en el cuarto lugar de los países de Suramérica con un costo de vida alta.

En este estudio comparan las posibilidades de los ciudadanos de acudir a restaurantes, un lujo que según los guaros pocos pueden darse.

En el caso de los países que conforman Suramérica, Uruguay está en primer lugar con un 49,39%, mientras que en segundo se encuentra Surinam con 73,61%, en el tercero está Chile con un 43,26%, mientras que Venezuela alcanza el cuarto lugar con un valor de 46,23% en cuanto a los precios de una comida más cara en restaurantes.

El economista Ángel Alvarado, del OVF, dijo que Venezuela es el país más caro del mundo para vivir. Incluso, está por encima de Suiza, Suecia y Noruega.

Naudy Pereira, economista, detalló que el incremento de los precios en restaurantes y de los alimentos en particular se debe a la inflación que, según el OVF, se ubicó en 4,8% en enero. Según el economista, esto significa que la materia prima y los rubros que utilizan siguen en aumento y el producto final también.

La venezolana Carmen Rodríguez cuenta apenas puede vivir con lo que cobra de pensión. Recuerda que en otros tiempos, además de las compras básicas del hogar también podía salir a disfrutar una tarde en familia. “Ya no se puede comer en la calle“, dice al recordar que con los Bs. 7 de pensión puede comprar máximo dos rubros.

El economista señala que si bien es cierto que se ha notado una leve mejoría en el país y se puede conseguir de todo, incluyendo más espacios de esparcimiento, el poder adquisitivo del venezolano es lo que no permite que se den todo ese tipo de “gustos y lujos”, pues están pendientes es de comprar la comida del día. Por ejemplo, una harina Pan y un kilo de arroz se consigue en un dólar por kilo, mientras que un aceite pisa los dos dólares.

Con información de LA PRENSA DE LARA

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