El presidente de Rusia, Vladímir Putin, llamó hoy a los agentes del orden a respetar los derechos y libertades civiles de la población tras la entrada en vigor de las enmiendas a la “Ley de la policía” que amplían considerablemente las facultades de este cuerpo.
“Quiero subrayar de modo especial: los derechos y las libertades de los ciudadanos deben ser garantizados. Saben que las organizaciones defensoras de derechos humanos han centrado su atención en las enmiendas a esta ley”, indicó el mandatario ruso en una reunión con la plana mayor del Ministerio del Interior ruso.
Recordó que en diciembre del año pasado se aprobaron las enmiendas a la “Ley de la policía” que amplían las facultades de los agentes del orden, pero señaló que “las preocupaciones de los defensores de derechos humanos no carecen de determinado fundamento”.
“Pido tomar esto en cuenta y garantizar los derechos y libertades de los ciudadanos”, recalcó, al insistir que la principal prioridad de la policía es la “ofensiva activa contra la criminalidad”.
También llamó a los agentes del orden a evitar excesos durante su trabajo con el sector empresarial y llamó a fundamentar bien las causas que se abran contra los empresarios.
“Cualquier investigación o acción de los órganos del Ministerio del Interior contra los empresarios debe ser fundamentada”, alertó.
En ese sentido, las acciones de la policía no deben “crear obstáculos a los negocios o afectar a las compañías que trabajan honestamente, creen empleos y paguen salarios adecuadamente”, dijo.
Las enmiendas a la ley que regula la actividad de la policía aprobadas a fines de 2021 permiten acordonar territorios y vallar lugares de eventos masivos, y precisan además los motivos por los que los agentes pueden entrar en los domicilios de los ciudadanos.
Ahora los policías pueden registrar un domicilio sin orden judicial para detener a sospechoso de haber cometido un delito o incluso en el caso de que en su interior se encuentre una persona señalada por un testigo como autor de un posible delito.
Los agentes están facultados para abrir automóviles sin mediar autorización judicial si es necesario para salvar una vida, evitar un delito, incautarse de armas o drogas y restablecer el orden público en caso de disturbios.
Con estas enmiendas, los policías quedan dotados de las mismas facultades que tienen los miembros de la Guardia Nacional, un cuerpo militarizado que depende directamente del presidente de Rusia, algo que ha despertado las alarmas de los defensores de derechos humanos en el país.
EFE