El presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja (ICRC), Peter Maurer, expresó hoy su preocupación por la seguridad de la población ucraniana a raíz del ataque militar ruso, y pidió que “se proteja a los civiles y los servicios esenciales”.
“Nuestro mensaje a las partes en conflicto es claro: mantengan la ley humanitaria internacional”, destacó Maurer en su cuenta oficial de Twitter.
El máximo responsable de ICRC, organización consagrada desde hace siglo y medio a la protección de víctimas de conflictos armados, subrayó que efectivos de la organización están ya respondiendo a las necesidades humanitarias en la zona “y se les debe permitir que sigan su labor de salvar vidas”.
La semana pasada la organización ya había advertido que la escalada de hostilidades estaba poniendo en peligro servicios esenciales, y por ejemplo se habían destruido las dos principales estaciones de bombeo en la región de Donetsk, vitales para el abastecimiento de agua potable de un millón de personas.
EFE