Vladimir Putin , quien hoy ordenó a sus fuerzas militares rusas entrar en la vecina Ucrania , es un hombre fuerte que parece disfrutar jugando con animales incluso cuando comienza guerras en Europa.
Por Daily Star
Traducción libre de lapatilla.com
También está dispuesto a mostrarle al mundo qué gran amante de la naturaleza es, mostrándonos regularmente cómo se las arregló para atrapar un pez o trabajar con los guardaparques.
Pero si bien puede esperar que las instantáneas lo retraten como un líder duro, también se ha abierto al ridículo en ocasiones.
Instagram fue bombardeado con personas que lo llamaban “Vladdy Daddy” en el período previo a su invasión de Ucrania , pero no es la primera vez que es el blanco de algunos chistes.
Estos son algunos de sus momentos más extraños.
En una de sus poses más famosas, Putin aparece con el torso desnudo con un caballo en 2019.
Muchos lo vieron como un intento de Putin de parecer un líder guerrero, pero la imagen lo dejó en ridículo y los bromistas se apresuraron a establecer comparaciones con la película Brokeback Mountain.
Las imágenes editadas circularon rápidamente, incluidas maquetas de Putin y el expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump , montando juntos a caballo en topless.
Caminando en la nieve cerca de Moscú, se ve al hombre que el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson , calificó hoy de “dictador”, jugando con un pastor búlgaro y un Akita Inu en 2013.
Incluso mientras le muestra al mundo lo juguetón que es, Putin tiene su marca “Rusia” a la vista durante esta oportunidad fotográfica, algo que es poco probable que haya sucedido por accidente.
En un extraño calendario de 2017 , Putin aparece varias veces con animales. En esta toma, está de vuelta en un caballo, aunque esta vez está completamente vestido, además de abrazar a un gatito.
El presidente no suele ser de grandes sonrisas, pero hay casi un atisbo de sonrisa mientras sostiene el moggy.
Los bromistas dijeron que era porque sostener al gatito lo hacía sentir como el malvado personaje de Blofeld en las películas de Bond.
Aquí se ve a Putin jugando con su perro, una Akita Inu. Esto fue justo antes de dar una entrevista a un periódico y un canal de televisión japoneses en el Kremlin en 2016.
Tal vez pensó que ser dueño de una raza que se originó en Japón lo ganaría el cariño de su audiencia japonesa, o tal vez simplemente le gustó la óptica de mostrarle al mundo cuán grande era su perro.
Ser hábil en el aire libre es otra cosa que al presidente le gusta retratar, y posa regularmente mientras caza o pesca.
Aquí se lo representa después de pescar un pez en el sur de Siberia en 2017.
Al ver la oportunidad de burlarse de sus propios líderes, un usuario indio de Twitter reaccionó sarcásticamente a esta imagen diciendo: “Esto no es nada comparado con nuestro primer ministro que atrapó cocodrilos con las manos desnudas. Noticias no verificadas pero que aparecen en los libros de texto escolares”.
En 2008, Putin ayudó a un científico ruso a colocar un rastreador GPS en un tigre en la reserva forestal Ussuriysky. Sin embargo, como señaló una persona en Twitter: “No se preocupe, la NSA lo está rastreando…”.
Es solo una de varias fotos de Putin con grandes felinos, incluidas imágenes de él abrazando a un cachorro de leopardo en Sochi y un cachorro de tigre en su casa de Moscú, con una elegante canasta de gatos.