Según un comunicado de la agencia, publicado en Facebook, los sistemas automatizados de control de radiación en la zona de exclusión disponibles en línea indican que la radiación ha aumentado en varios puntos de observación.
Con todo, “debido a la ocupación y hostilidades” en la zona, es actualmente “imposible” establecer las razones del aumento de la radiación.
El Ejército de Rusia ocupó ayer la antigua central nuclear de Chernóbil, escenario de la mayor catástrofe nuclear de la historia, después de fuertes combates contra las Fuerzas Armadas ucranianas.
El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, consideró esta captura “una declaración de guerra contra toda Europa”.
Kiev advirtió que, si los restos radiactivos resultan dañados, “el polvo nuclear puede propagarse por todo el territorio de Ucrania, Bielorrusia y los países de la Unión Europea (UE)”.
Zelenski alabó la entrega de sus soldados “para que la tragedia de 1986 no se repita”, pero admitió que los soldados rusos acabaron por doblegar la resistencia ucraniana, que perdió el control sobre Chernóbil.
Este viernes, el Ministerio de Defensa de Rusia refutó las declaraciones sobre la subida del nivel de radiación en la zona.
Según el portavoz de la cartera rusa, Igor Konashénkov, los militares rusos se ocupan de la protección de las instalaciones de Chernóbil junto con un batallón ucraniano que se encarga de garantizar la seguridad de la antigua central nuclear.
“Se ha llegado a un acuerdo con el batallón especial ucraniano de protección de la central de Chernóbil para garantizar conjuntamente la seguridad de los reactores nucleares y el sarcófago de la planta”, dijo.