El presidente peruano, Pedro Castillo, denunció este sábado un intento de golpe de estado y pidió activar la Carta Democrática de la Organización de los Estados Americanos (OEA) para dar tranquilidad al país tras denuncias de una empresaria que lo implicarían en actos de corrupción.
“Llamo a la comunidad internacional y al pueblo peruano para activar la Carta Democrática Interamericana y permanecer atentos contra cualquier intento desestabilizador y de golpe en el país”, indicó Castillo en su cuenta de la red Twitter.
“Circula en la prensa monopólica una serie de especulaciones que tienen como objetivo atentar contra la democracia. Los mismos que conspiraron contra los anteriores mandatarios, quieren hacerlo ahora contra el Gobierno del pueblo”, señaló.
“Denuncio anticipadamente este tipo de acciones que solo insisten en maniobras políticas antidemocráticas con la finalidad de generar inestabilidad en el país”, agregó.
Según la prensa, la empresaria Karelim López, quien es investigada por su presunta participación en delitos de corrupción, comprometió al mandatario en declaraciones ante la Fiscalía, señalándolo en actividades de una supuesta organización criminal enquistada en el gobierno. En ese sentido indicaron que estaría infiltrada en el gobierno, diversos ministerios y el Congreso.
El objetivo de dicha organización, aseguró el diario La República en su edición digital, sería obtener dinero con las licitaciones de obras públicas.
El dinero recaudado, según López, sería utilizado para pagar las deudas que Castillo habría contraído en la campaña electoral 2021 en la que derrotó a la derechista Keiko Fujimori.
“Tengo que pagar a los empresarios que han financiado mi campaña”, le habría dicho el presidente a López, informó el diario.
“Lo más relevante de la declaración es que afirma que el presidente Pedro Castillo es parte de una mafia que opera en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones direccionando licitaciones del sector”, señaló el diario El Comercio tras señalar que la empresaria dio su declaración el 18 de febrero, ante la fiscal de lavado de activos Luz Taquire.
López figura en una investigación que involucra asimismo a Castillo, por presuntamente haber “intervenido –indebida e indirectamente–” en un proceso de licitación pública para la construcción de un puente vehicular sobre el río Huallaga, en la región de San Martín, al norte de Perú.
Castillo sostuvo que la empresaria “ha brindado a la Fiscalía declaraciones sin sustento jurídico ni coherencia con la verdad que amenazan la ética y la transparencia de los procedimientos de toda investigación”.
– Quieren vacancia –
Por su parte, el jefe del partido oficialista Perú Libre, Vladimir Cerrón dijo en Twitter que “los medios preparan terreno para acusar al presidente de liderar organización criminal y parlamento presenta moción de vacancia esta semana”.
“Queda demostrado que el acercamiento de la lobista Karelin López, al presidente, siempre fue con el objetivo de generar causal de vacancia”, indicó en Twitter el ex jefe de gabinete, Guido de Bellido.
“El presidente no está involucrado en ningún acto de corrupción. La Fiscalía esta haciendo un circo para buscar su vacancia”, sostuvo por su parte ante la prensa Eduardo Pachas, abogado de Castillo.
Tras calificar las acusaciones de sumamente graves, el expresidente Martín Vizcarra (2018-2020) pidió la renuncia del mandatario.
“De ser cierto (la declaración), el presidente (Pedro) Castillo definitivamente no puede continuar en el cargo”, declaró a periodistas Vizcarra, destituido por el Congreso en 2020.
Las denuncias se publican a diez días de la presentación del gabinete ministerial en el Parlamento para sustentar la política general de gobierno y solicitar el voto de confianza.
Castillo, de 52 años, ganó en junio pasado las últimas elecciones al frente de un pequeño partido de corte marxista-leninista con 50,12% de los votos, en un reñido balotaje contra la derechista Keiko Fujimori.
AFP