Agua turbia y maloliente fue lo que envió la Hidrológica del Caribe (Hidrocaribe), a Porlamar y el resto de las poblaciones del municipio Mariño, en la isla de Margarita, en el ciclo que después de 45 días debieron recibir para la Semana Santa.
Por: Dexcy Guédez | Corresponsalía La Patilla
Fuentes de la hidrológica confirmaron que en realidad el ciclo de suministro correspondía al municipio García, pero dada la llegada de la Semana Santa y que Porlamar cuenta con muchos establecimientos comerciales y de hospedajes, decidieron enviarla al municipio metropolitano Mariño.
Sin embargo, el agua no fue clorada por el sistema antes de llegar a Margarita, lo que no la hace apta para el consumo humano.
María Moya aseguró que el agua no sirve ni siquiera para lavar la ropa.
“Si acaso se podrá utilizar para regar las matas y las salas sanitarias. No me atrevo ni a lavar los platos”.
Marisa Narváez, residente en un condominio de Porlamar, afirmó que cada mes las facturas llegan más aumentadas.
“No es justo que nos pongan solamente dos días de suministro y la factura llegue por miles de bolívares. Si al menos llegara limpia, otra cosa sería”, acotó.
Jesús Alberto Ramos reflexionó sobre la necesidad de contar con agua potable para los niños y las personas de la tercera edad. “Ellos son los que requieren más agua potable para el baño y mantener limpios los sitios donde duermen y descansan. Con los sueldos miserables no podemos comprar agua mineral para beber y para el aseo de esas personas”, agregó.