Así lo ratificaron lo informaron fuerzas militares del país vecino; entregaron material bélico e identificas personales de los presuntos guerrilleros colombianos.
Por infobae.com
Luego de que se confirmó que once civiles murieron en el polémico operativo del Ejército Nacional en la vereda Alto Remanso, en el municipio de Puerto Leguizamo (departamento de Putumayo), en las últimas horas se conoció que los criminales a los que iba dirigido el tiroteo se estarían refugiando en Ecuador.
Así lo dio a conocer el Ejército de ese país en un documento revelado por Noticias RCN, en el que se evidencia que varios integrantes de la disidencia de las FARC conocida como Comandos de la Frontera habrían huido a la nación fronteriza para librarse de la justicia.
El texto, originario del Batallón de Selva No. 55 de las fuerzas militares del país vecino, asegura que cuando ocurrió el tiroteo en territorio colombiano, ellos encontraron elementos que evidenciarían que los disidentes pasaron por ahí para esconderse en Ecuador.
Según cuenta el informativo, el Ejército dirigido por el presidente ecuatoriano Guillermo Lasso encontró una cantimplora que tendría impactos de bala, además de material bélico como municiones 5.56 mm y otras prendas como sacos y pantalonetas que serían distintivas del citado grupo armado.
Es más, Noticias RCN asegura que los militares extranjeros también encontraron la cédula de un hombre colombiano identificado como Jairo Alexander, oriundo de Tumaco, Nariño. El noticiero dice que no revela el apellido del sujeto; sin embargo, aseguran que su estatura es de 1.65 de altura.
Toda esta información ya reposa en los archivos del Ejército de Colombia, dirigido por el coronel Eduardo Zapateiro. Las fuerzas militares ecuatorianas entregaron dicha evidencia luego de la controversia suscitada en el país, al cuestionarse a la fuerza pública nacional por matar a ciudadanos por querer capturar a maleantes como alias ‘Bruno’.
Por ahora, el Ejército colombiano no ha emitido pronunciamiento alguno sobre esta nueva información. Sin embargo, esa evidencia se suma al apoyo que sus homólogos ecuatorianos expresaron esta semana tras los cuestionamientos en el país.
El Ejército de Ecuador aseguró que comparte las mismas preocupaciones de sus pares colombianos y que respalda al general Eduardo Zapateiro. El comandante de esa institución, Luis Enrique Burbano, destacó que los hechos delincuenciales que afectan a aquella zona de Colombia tienen un ‘efecto incidental’ en la frontera con Ecuador.
“Compartimos la misma preocupación de las autoridades colombianas, sobre la presencia de grupos ilegales en las zonas limítrofes de ambos países que están afectando el orden público”, manifestó el oficial.
“Al conocer los hechos violentos que los grupos irregulares de Colombia están efectuando en el departamento del Putumayo, cuyos efectos inciden también en las provincias fronterizas, principalmente de Sucumbíos, te manifiesto, apreciado Eduardo, que tenemos y compartimos las mías preocupaciones”, añadió el general ecuatoriano.
El alto mando de la fuerza pública ecuatoriana destacó que reforzará las acciones para impedir cualquier actitud violenta proveniente de bandas criminales colombianas asentadas cerca a la frontera. “El señor jefe del comando Conjunto de las Fuerzas Armadas ha impartido las disposiciones a las unidades del Ejército ecuatoriano de la frontera norte para que redoblen esfuerzos en nuestro territorio a fin de impedir que estos actos violentos del grupo autodenominado Comandos de la Frontera incidan en la seguridad de los ciudadanos que habitan en las zonas limítrofes”, recalcó.
Cabe recordar que esta semana, la Oficina en Colombia de la ONU Derechos Humanos cuestionó la operación militar adelantada en la Vereda Alto Remanso en Puerto Leguizamo. La entidad le pidió a la Fiscalía “una investigación exhaustiva” y asumir “todas las medidas disciplinarias y penales para enjuiciar y sancionar a los responsables de lo ocurrido”.
“El 28 de marzo, en Alto Remanso, se habría iniciado un operativo llevado a cabo por varias unidades militares en el que se habría hecho uso de armas de fuego, mientras estaban en el bazar de 30 a 50 personas, incluyendo niños, niñas y mujeres (…) Como resultado de la operación militar y del uso de la fuerza letal, en Alto Remanso resultaron muertas al menos once personas y cinco más quedaron heridas”, se lee en el comunicado.