Inter perdió ante Bologna y ya no depende de sí mismo para ganar el Scudetto

Inter perdió ante Bologna y ya no depende de sí mismo para ganar el Scudetto

Nicola Sansone. EFE/EPA/ELISABETTA BARACCHI

 

 

El Inter perdió la oportunidad de superar al Milan en la clasificación y colocarse líder de la Serie A tras caer derrotado 2-1 en su visita al Bolonia, que se llevó la victoria gracias a una pifia monumental del portero Ionut Radu que alejó a su equipo del “Scudetto”.





El guardameta rumano falló estrepitosamente a falta de media hora del final del choque para ofrecer en bandeja los tres puntos a su rival. A Radu se le escapó un saque de banda sencillo de Ivan Perisic que pasó por debajo de su pie derecho y que remató Nicola Sansone ante el asombro de sus compañeros, a dos puntos del líder cuando restan cuatro jornadas para el final.

En ellas, el Inter deberá enfrentarse al Udinese, al Empoli, al Cagliari y al Sampdoria y esperar que el Milan pinche en alguno de los encuentros que disputará contra el Fiorentina, el Verona, el Atalanta y el Sassuolo.

Eso no habría ocurrido si no hubiese perdido este miércoles ante un equipo que de la zona media de la clasificación que no se juega nada. El Bolonia, ya salvado y sin opciones de jugar en Europa, condenó al Inter a esperar un pinchazo del Milan para sumar su segundo título consecutivo.

Y eso que comenzó adelantándose en el marcador con un tanto de Perisic a los tres minutos. El jugador croata, tras una gran jugada individual en la que superó a varios rivales, firmó un golazo con un golpeo desde fuera del área que puso al Inter por delante en el marcador muy pronto.

Durante casi media hora, marcó el paso del encuentro y pudo aumentar su renta con una ocasión de Lautaro Martínez que salvó Lukasz Skorupski justo antes del empate, obra de Marko Arnautovic después de rematar de cabeza un centro de Musa Barrow.

El Inter aún tenía tiempo por delante para evitar el chasco, pero ni Federico Dimarco ni Stefan de Vrij consiguieron superar a la figura engrandecida de Skorupski, uno de los mejores de su equipo. Después llegó la jugada desgraciada de Radu, que puso el broche final a una jornada terrible para un equipo que no aprovechó una ocasión de oro para ocupar el liderato.

Otro pinchazo significativo lo firmó el Atalanta, que volvió a jugar a la ruleta rusa en un duelo marca de la casa que acabó con un resultado llamativo: 4-4 en su estadio frente al Torino para quedarse casi matemáticamente fuera de los puestos de Liga de Campeones.

El Juventus, cuarto clasificado y último que ocuparía una plaza en la máxima competición continental, está a once puntos de distancia con 12 en juego. Y, ni siquiera, el Atalanta está entre los seis primeros. Ahora mismo, estaría fuera de Europa.

No pudo con un aguerrido Totino, casi siempre en ventaja en el marcador y que llegó a contar con una diferencia a favor de dos goles tras el 2-4 que firmó Remo Freuler en propia meta a falta de 22 minutos para el final.

Antes marcaron para el Torino Antonio Sanabria y Sasa Lukic -en dos ocasiones-, mientras que Luis Muriel, desde el punto de penalti, y Marten de Roon, asistido por el delantero colombiano, hicieron los dos tantos del Atalanta. En los últimos minutos, un arreón final de los hombres de Gian Piero Gasperini, salvó una derrota asegurada con otro gol de penalti de Muriel y con otro tanto de Pasalic. Ambos, fueron insuficientes para colocar al Atalanta en puestos europeos.

Y en el Fiorentina-Udinese, Gerard Deulofeu, sumó su duodécimo tanto del curso en todas las competiciones oficiales e igualó su mejor registro goleador desde que es jugador profesional en un equipo de Primera División.

El ex jugador del Barcelona dirigió la victoria del Udinese (0-4) con la que complicó la existencia europea de su rival y asentó a su equipo en la zona media de la clasificación de la Serie A. Deulofeu prácticamente sentenció el partido antes del descanso tras marcar el 0-2 después de recoger un rebote dentro del área.

Fue su tanto número doce en la presente campaña. Los mismos que firmó en el Watford durante el curso 2018/19. Todos los goles los ha marcado en alguno de los 29 partidos de Liga en los 2.312 minutos que ha disputado. Ha hecho un tanto cada 192 minutos, mientras que en el Watford, a lo largo de 33 encuentros, firmó uno cada 190 minutos.

Deulofeu, en el Udinese, ha encontrado su hueco. Es un jugador mucho más maduro. Se ha convertido en un futbolista que vela más por el equipo que por sus individualidades. Defiende, ataca, ayuda, asiste y, además, marca goles. Por eso, casi se ha superado a sí mismo y tendrá tiempo de mejorar sus cifras en los partidos que aún le restan para terminar la temporada.

El otro hombre del encuentro fue el otro español del Udinese. Pablo Marí, acompañó a Deulofeu en la lista de goleadores y se estrenó este curso con el tanto que abrió el marcador. El ex jugador del Arsenal, con un zurdazo imparable, encarriló un duelo que culminaron Walace y Destiny Udogie con el tercer y el cuarto tanto en el tiempo añadido.

No tuvo mucha más historia salvo la presencia de Álvaro Odriozola en el once del Fiorentina: tras tres suplencias consecutivas, el lateral cedido por el Real Madrid volvió al once del técnico Vincenzo Italiano.

EFE