Desde hace varias semanas, la red de cloacas colapsó y a pesar de los reiterados llamados a la empresa Hidrológica del Caribe (Hidrocaribe), no han tenido respuesta.
Por Dexcy Guédez
Carmen Salazar, habitante en uno de los edificios ubicados en la calle San Rafael, que se intercepta con la avenida 4 de Mayo de Porlamar, denunció que las aguas negras impiden el paso peatonal por esa zona cercana a la alcaldía del municipio Mariño.
El bote de aguas tiene más de un mes y está ubicado frente al edificio Torcal Plaza, pero en su largo recorrido llega hasta la calle Lárez. “El brote de las aguas putrefactas es mayor en horarios de las 7:00 de la mañana, 1:00 de la tarde y 8:00 de la noche cuando en los edificios aledaños activan el suministro de agua”, agregó Julio Mata, vecino del sector.
En vista de la indiferencia de la hidrológica, los habitantes claman la atención del alcalde José Antonio González, para que les ayude a encontrar una salida a ese feo espectáculo en la céntrica zona margariteña.
Resaltan que en los alrededores hay establecimientos de comida, panadería y además habitan menores de edad y adultos mayores que se ven afectados con el aumento de las plagas que surgen del desbordamiento de las aguas servidas.
“La situación se complica, porque toda la basura que lanzan a las calles las personas inconscientes, se quedan pegadas en esas aguas negras”, acotó Mata.
Los habitantes del sector no justifican que en un estado netamente turístico, salten a la vista de residentes y visitantes, esos “cuadros tan deprimentes”.
