Sesenta organizaciones civiles pidieron hoy en una carta abierta al secretario general de la ONU, António Guterres, participar en la selección de un sucesor o sucesora de la alta comisionada de Naciones Unidas para los derechos humanos, Michelle Bachelet, y recomendaron que sea una figura “imparcial”.
Estas organizaciones afirmaron que el proceso de sucesión “debe ser abierto, transparente y basado en méritos”, y en él “debe haber consultas amplias y sustanciales con organizaciones independientes en materia de derechos humanos”.
Quien suceda a Bachelet, que deja el cargo el 31 de agosto, “debe ser una persona con altas convicciones morales e integridad personal; alguien independiente, imparcial, competente y experto en el campo de los derechos humanos”, añadió la misiva dirigida a Guterres.
“Es necesario un ‘campeón de los derechos humanos’ con principios y valor”, agregaron las organizaciones no gubernamentales, quienes subrayaron que la dirección de la Oficina de la ONU para los Derechos Humanos es “crítica” para la promoción global de las libertades fundamentales.
Bachelet declaró la semana pasada que no aspiraría a un segundo mandato como alta comisionada, alegando motivos personales y el deseo de regresar a su país.
Su anunció se produjo pocas semanas después de una visita oficial a China que fue muy criticada por organizaciones de derechos humanos ya que Bachelet, según ellas, no denunció con contundencia en ella la situación de los uigures y otros pueblos musulmanes en la región noroccidental china de Xinjiang.
La organización estadounidense Human Rights Watch (HRW), una de las firmantes de la carta de hoy, subrayó tras el viaje de Bachelet a China que la alta comisionada había adoptado durante su mandato un perfil excesivamente diplomático.
Otras organizaciones firmantes de la carta fueron Amnistía Internacional, el Congreso Mundial Uigur, la Organización Mundial Contra la Tortura o la Comisión Internacional de Juristas.
EFE