La defensa de la “socialite” Ghislaine Maxwell anunció que solicitará que se posponga el fallo, previsto para este martes, después de que su defendida haya sido trasladada a una celda confinada por riesgo de suicidio, impidiéndole prepararse para la sentencia.
En una carta fechada el 25 de junio dirigida a la jueza que instruye el caso Alison Nathan, la abogada Bobbi C.Sternhei señala que este lunes “solicitará formalmente un aplazamiento” del fallo ya que a su defendida no se le permite “poseer ni revisar documentos legales” ni tampoco “papel ni bolígrafo”, lo que le ha “impedido prepararse para la sentencia”.
Lamenta, asimismo, que “sin haberse realizado un examen psicológico y sin justificación”, las autoridades de la cárcel donde está internada, el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn, han puesto a Maxwell, de 60 años, “bajo vigilancia por suicidio”.
“No es suicida”, asegura la abogada.
La fiscalía neoyorquina ha pedido entre 30 y 55 años de cárcel para la hija del que fuera magnate de la prensa británica Robert Maxwell, educada en Oxford, por tráfico tráfico sexual de menores, para su expareja y amigo Jeffrey Epstein, que se suicidó en 2019 en una cárcel neoyorquina cuando iba a sentarse en el banquillo.
La defensa de Maxwell ha pedido clemencia al tribunal, alegando una infancia traumática y que ha sido injustamente acusada porque Epstein se libró de juicio.
Maxwell está en la cárcel desde su detención en el verano boreal de 2020.
Durante el juicio, la fiscalía arguyó que Maxwell fue “clave” en la red que creó Epstein para captar a jóvenes para darles masajes, durante los cuales abusaba de ellas.
En una de las ramificaciones de este caso, el príncipe Andrés de Inglaterra, amigo de Epstein, llegó en febrero a un acuerdo económico para poner fin a una demanda de abuso de Virginia Giuffre, que aseguró que Epstein y Maxwell la incitaron a tener sexo con el príncipe cuando era menor.
AFP