La conmemoración del Día de la Independencia en Argentina volvió a ser la ocasión para salir a las calles y expresar el rechazo a la gestión del presidente argentino Alberto Fernández, tal como viene sucediendo desde 2020, primer año de su mandato. Este año, la diferencia es que una profunda crisis política sacude al Gobierno e inyecta más fervor al reclamo ciudadano.
Por Inés Beato Vassolo | La Nación
Mientras las organizaciones de izquierda piqueteras se plantaron más temprano en el centro porteño para alzar la voz y pronunciarse, una vez más, contra el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FM), grupos de autoconvocados, a los que se sumaron sectores de la oposición, realizaron un banderazo en la Plaza de Mayo, con arengas en favor de la patria y de los valores republicanos, además de pedir la condena de la vicepresidenta Cristina Kirchner en las causas judiciales que la involucran.
Un grupo de manifestantes sigue empujando las rejas de la Casa Rosada. #9DeJulio pic.twitter.com/gbABJ1ss6n
— Gabriel Bastidas (@Gbastidas) July 9, 2022
En la vera norte del Obelisco, las pancartas e insignias de las organizaciones piqueteras se reemplazaron pasadas las 15.30 por banderas argentinas, cuando empezaron a asomar los ciudadanos autoconvocados al banderazo, cuya realización fue impulsada en las redes sociales y se extendió a distintas ciudades del interior.
Minutos antes de la hora de las 16, los manifestantes que llegaron al centro tras la difusión de los hashtag #9J, #Argentinazo y #hartos –entre otros–, entonaron las estrofas del Himno nacional y reclamaron en favor de una Justicia independiente.
Más funcionarios de la Policía Federal Argentina refuerzan la seguridad de la Casa Rosada. #9DeJulio pic.twitter.com/VZDVn9XVsn
— Gabriel Bastidas (@Gbastidas) July 9, 2022
“Vamos jueces, pongan huevo, basta de estos chorros”, claman, al son de las cacerolas, quienes ahora ocuparon 9 de Julio y Corrientes tras el retiro de los grupos piqueteros. Entre los que se acercaron se veía al actor y exdiputado nacional Luis Brandoni.
Unos metros antes de la Catedral se armó un cordón policial para desalentar el paso de los participantes del banderazo en El Obelisco y en Plaza de Mayo, pero muchos manifestantes avanzaron igual. “Avancen. Esto también es nuestro”, gritaban, mientras convocaban a los que quedaron al otro lado del cordón.
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