De un tiempo para acá, la alimentación se ha convertido en un factor determinante en la preparación y el día a día de los deportistas en general y los futbolistas en particular. La mayor parte de los jugadores cuentan con nutricionistas particulares que cuidan su dieta. Qué comer, cuándo comerlo y en qué cantidad es determinante, así lo reseñó 20 MINUTOS.
Recientemente, muchos de esos nutricionistas elaboran sus dietas con un superalimento como protagonista principal de la alimentación de grandes estrellas mundiales como Cristiano Ronaldo, Messi o Benzema. Los tres comparten el uso de las algas, en particular la espirulina, como algo clave en sus comidas.
Según los expertos, las algas aportan siete veces más proteína que la carne, el pescado o la verdura, y ganan todavía más valor si se complementan con alimentos naturales procedentes de raíces, semillas o frutas. Una combinación perfecta que crea una concentración de nutrientes esenciales fáciles de asimilar y digerir.
Las algas tienen mucho valor nutricional y la gran virtud de obtener mucha proteína vegetal con sólo una pequeña cantidad de ellas. Algo que se sintetiza mucho mejor que la proteína animal.
Alberto Mastromatteo, uno de los chefs que trabaja, entre otros futbolistas, con Benzema, asegura que las algas son el superalimento que lo ha cambiado todo. “Soy un fervoroso creyente en el extraordinario poder nutritivo de las microalgas, fuentes inigualables de ácidos grasos poliinsaturados omega-3, vitaminas, carotenoides, antioxidantes, etc. Por eso, sueleo meter espirulina y chlorella en todos mis platos”, explica en unas declaraciones recogidas por El Economista.
La espirulina, conocida como ‘oro azul’ tiene la etiqueta de superalimento de las Naciones Unidas y la Organización Mundial de la Salud. El motivo es su alto aporte proteico (está constituida por proteínas en un 70%) y su riqueza en vitaminas, potasio, hierro y magnesio.
Entre las virtudes de la espirulina están la mejora del rendimiento físico y el incremento de la vitalidad y la energía, así como la reducción de calambres y la prevención de lesiones musculares y articulares, además de mejorar la recuperación tras un desgaste físico considerable.