Las historias paranormales son entretenidas, hasta que comienzan a pasar en tu propia casa. En la provincia de Tucumán, en Argentina una familia soportó sustos y visiones sobrenaturales por generaciones en una casa embrujada, cuya actividad paranormal comenzó con un ritual.
Por Crónica
El testimonio lo ofreció un usuario anónimo, quien asegura que la casa de su abuela estaba embrujada y era el foco de actividad paranormal desde la década de los 90: “Siempre pasaron cosas que ella como buena religiosa no le daba mucha importancia, hasta que mi tía y sus dos hijos fueron a vivir transitoriamente en esa casa”, relató un usuario anónimo para las redes de Tucumán Paranormal.
“Mi abuela les ofreció una habitación para los tres, ya que su casa tiene solo dos dormitorios. Al principio todo estaba bien hasta que una noche de invierno, mi primo dormía en una cama cucheta, él arriba y su hermano abajo. Esa noche él sintió como el viento abrió de golpe las ventanas, a lo que él, por el frío, se levantó a cerrarlas con seguro”, contó.
“A los minutos, otra vez se abrió la ventana y vio acercándose hacia él a una mujer que flotaba vestida de negro, de un rostro muy atractivo, pero de blanca palidez, él se asustó tanto que no pudo dormir”, asegura el escritor de este relato, sobre la terrorífica aparición.
“A la mañana siguiente les comentó a mi abuela y a mi tía lo sucedido, pero no quisieron creer. Él quedó intranquilo y se resistía en dormir en esa habitación, así que llevó su colchón al living”. Sin embargo, los horrores no acabaron allí: “esa noche, como a las 3 de la mañana, mi tía sentía una respiración helada en su oreja”, continuó su relato el internauta.
Continúe leyendo en Crónica