La falda volvió a verse de la mano de Bad Bunny, quien posó con un vestido que recuerda a las novias. Brad Pitt lució esta prenda en el estreno de su nueva película en Berlín. Alcances y masividad de un fenómeno que ya está ocurriendo. La palabra de los expertos.
Por infobae.com
Bad Bunny, se sabe, busca siempre ser noticia no solo como artista, sino subiéndose al pedestal de ícono de moda. Y ya sea en una alfombra roja como en la porta de revista, marca tendencia. En este caso, hay una prenda que -casi- ya le pertenece: la pollera. Se trata de liberarse de cualquier etiqueta de género. El Conejo Malo lo ha hecho de nuevo y en la que será la edición de septiembre para Harper’s Bazaar -versión Estados Unidos- se ha mostrado con un impresionante vestido blanco de doble corte con transparencia inferior, causando gran revuelo en redes sociales.
“Bad Bunny puede usar falda, perrear con un hombre incluso besarlo y seguirá siendo hetero, creo que eso ya lo demostró en más de una ocasión, los traumados son ustedes”, fue uno de los comentarios en Instagram. “La ropa no tiene género y eso le cuesta a la generación de cemento que se empeña en querernos hacer vivir entre machismo y homofobia tal y como a ellos les pasó”, dijo por su parte otro usuario de la red social. “No se trata del año, sino de la generación que somos y si prefieren ver a una mujer desaparecida que un hombre con vestido en Instagram, me da gusto ser de ‘cristal’”, escribió otro de sus fans.
Brad Pitt es otro famoso que siempre llama la atención. Ya sea por sus increíbles 58 años tan bien llevados, o por algún atuendo que elige ponerse, el actor genera comentarios y es noticia. Esta vez, tuvo que ver con la segunda cuestión: Pitt llegó a la alfombra roja del estreno de su nueva película en Berlín con un equipo marrón de saco informal con pollera y una camisa lila debajo.
La imagen se viralizó en de inmediato hace un poco menos de un mes en redes y causó muy buenas críticas tanto de diseñadores como de parte de sus fans. Además, Pitt supo combinar su look con un par de anteojos marrones de una famosa marca y unos borceguíes de cuero con unas medias negras largas. El actor no dejó nada librado al azar: usó como accesorio unos collares que se vieron gracias a la camisa casi desabrochada que llevaba.
“Desde el 2019 varios diseñadores se subieron a la tendencia y la adaptaron, lo que se trasladó a alfombras rojas y celebridades como el músico Billy Porter por ejemplo, que la usaron. No sé si en su uso diario, pero sí es más regular en sus apariciones públicas, o Bad Bunny que ayudó a cambiar la perspectiva que eran hombres queer (no heterosexuales) los que podían usar la prenda”, dijo en una nota reciente Juliana Borobio, periodista y especialista en moda,
“Si bien no es algo nuevo y ahora lo vemos cada vez más, siempre se usaron en las pasarelas. Hay diseñadores que lo vienen haciendo hace años y en los noventa existió una corriente de varones que usaron falda”, agregó Borobio.
Aunque hay muchos factores que influyen en dicha tendencia, la especialista destacó dos fundamentales: “El aumento de la moda sin género, que viene siendo cada vez más popular, y la pandemia, que ayudó a que la gente estuviera más relajada en la casa y buscara algo diferente, los hombres al no tener que usar lo asignado a hombres se sintieron con libertad de experimentar respecto a lo que se ponían”.
¿Cuánto tiempo podría pasar desde que la tendencia llega a las pasarelas hasta que se vuelve algo cotidiano? ¿Cómo es ese proceso? “Depende cual sea la teoría de adopción de las tendencias, lo más tradicional dice que primero los diseñadores largan la tendencia, la adoptan las celebridades y gente influyente, pasa a grupos de personas que le interesa la moda pero no son tan populares y eso va bajando y luego de bastante tiempo llega al grueso de la población”, dijo la experta.
En los últimos más de 200 años, después de la Revolución Francesa, la ropa de los hombres no cambió mucho, tiene que ver con lo que se llama con ‘la gran renuncia masculina’, que lo que planteaba era acordar relegar lo que tenía que ver con el adorno del cuerpo, con cosas frívolas pre revolución (maquillaje, peinado) a las mujeres o asociado a lo femenino porque ellos tuvieron que encargarse de cosas ‘más importantes’, como la administración del Estado, es algo que se mantuvo hasta la fecha y cambiar las costumbres es difícil.
Hubo un intento en los ‘70 y en los ‘90. Sucede cada 20 años más o menos y ahora toca de vuelta. Sin dudas Kurt Cobain, quizás uno de los primeros feministas de esta nueva era, fue una de las figuras que se animó a usar esta prenda tanto para entregas de premios como para ruedas de prensa y eventos públicos.
“Me encanta, me encanta!”, dice enérgico el diseñador Jorge Rey. “Es una moda que ya viene desde hace mucho tiempo, se viene imponiendo hace un montón. Creo que ahora más que nunca está cobrando auge. Como moda hay mucha gente que fue precursora de esto, pero hoy en día, ya se puede lograr que va a ser una moda. Me parece muy canchero. Creo que para cualquier ámbito es más”, expresó Rey.
“Hay algunas escocesas que son largas, que quedan muy cancheras con unos borcegos y unas medias de red. Creo que hay una variedad muy amplia, pueden ser de cuero, pueden ser tableadas, escocesas plisadas, me parece que está muy bueno, solamente hay que tener actitud para llevarlo adelante”, agrega Rey.
El tema de la ropa sin género, ¿tiene que ver con esta tendencia o es otro fenómeno en paralelo? “La ropa sin género está más enfocada a lo que es la ropa tradicionalmente masculina, prendas overzise que no marcan la figura, pantalones, zapatillas o cosas sin tacos, cosas que están más orientadas a lo que consideramos como ropa de hombre, quedan prendas asociadas a las mujeres. La línea se está borrando y tiene que ver con hacia dónde va la sociedad y que cada vez mas personas se identifiquen como género fluido o no binario, más la representación en cine, tele, revistas y la evolución de la sociedad en general”, sostuvo Borobio.
Rey dice por su parte: “¡La moda no tiene que tener género!, así que me encanta que la pollera este a full en los hombres y bueno, las falda de cuero son mis preferidas, son algo brutal”.
“Me encanta las polleras en los hombres”, afirma el diseñador Benito Fernández a Infobae. “En cuanto al caso de Brad Pitt, es un referente, un influencer con el que se comunica tal vez más que en una pasarela. Me parece buenísimo porque tanto el inconsciente como el consciente de la gente, va a sacando el prejuicio de lo femenino y lo masculino, y esto que se está instalando del sin género. Me encanta, además de cómo estuvo lookeado, que sea él, el que pueda sacar los prejuicios”
La diseñadora Patricia Profumo analizó a Infobae: “Justamente ahora estoy de viaje por Inglaterra y Escocia y se usa mucho la pollera. Que Brad Pitt lo haya vuelto a instalar me parece bárbaro. Es una prenda culturar, lo ha sido desde siglos. Me parece que en la actualidad está bueno usar falda, creo que tiene mucho estilo, que tiene onda. Seguramente nos será para todas los hombres, algunos puede no sentirse cómodos. Para otros será como una invasión en su forma de vestir”.
Para la especialista la falda definitivamente suma a la moda. “Me parece divertido, versátil, descomprime lo clásico del hombre sí o sí con pantalones. No tiene que encuadrarse la falda solamente a las mujeres. Aplicarlo a la moda masculina suma y lo de Brad Pitt me encanta. Es justamente un ícono mundial, no solo de cine, sino dentro del mundo de la moda y las marcas internacionales.
“La nueva generación de adolescentes creció con modelos de varones menos tóxicos y están creciendo con eso y ven como celebridades o personas influyentes en la cultura rompen estos estereotipos y ven a sus compañeras con más opciones, porque la moda es lo único que nos dejaron en la repartija de cosas. Esas cosas están cambiando”, cerró Borobio.