Los olores putrefactos y el riesgo de enfermedades como consecuencia de las aguas negras que circulan libremente por la avenida 31 de Julio a la altura de Guatamare, municipio García de la isla de Margarita, hacen invivible los días a más de 20 familias de la zona.
Por Dexcy Guédez
Zurama Villarroel denunció que desde noviembre del año pasado colapsó la red de aguas negras en ese sector cercano al núcleo Nueva Esparta de la Universidad de Oriente, y a pesar de las constantes quejas ante la empresa Hidrológica del Caribe (Hidrocaribe), la respuesta ha sido nula.
“Lo que nos preocupa es que hay muchos niños y adultos mayores que están sufriendo afecciones en la piel, así como dificultades respiratorias por los olores nauseabundos que tienen que respirar”, apuntó Villarroel.
Luis Millán se quejó de la indiferencia de Hidrocaribe, pero también considera que hay indolencia por parte del alcalde chavista Cruz Lairet al no interceder ante la hidrológica para que les solucionen ese grave problema.
“No podemos ni cocinar, porque los malos olores no nos dejan y con el sol del mediodía, la putrefacción aumenta. Yo no creo que el gobernador y el alcalde no estén enterados de esta situación que ya va para un año”, recalcó Millán.
También Alexis Villarroel emplazó a las autoridades de Hidrocaribe y del municipio García a buscarle salida a esa problemática ambiental y sanitaria.
“Hablamos con uno de los contratistas de la alcaldía del municipio y prometió que después de las fiestas de la Virgen del Valle, se encargaría de resolver y pasarle la factura al alcalde Cruz Lairet, pero la situación sigue empeorando, porque las lluvias hacen desbordar más aguas podridas”, lamentó Villarroel.