Un video difundido por el medio especializado en aviación comercial Jacdec mostró el momento en que un avión con destino a San Pablo, Brasil, se vio obligado a volver al aeropuerto tras sufrir un desperfecto técnico.
Por Infobae
La nave, con 256 pasajeros a bordo, despegó a las 11:24 de la noche del miércoles del Aeropuerto Internacional de Newark, Nueva Jersey (EEUU). A poco menos de una hora y media de vuelo comenzaron a producirse chispazos provenientes de la bomba hidráulica.
Este modelo cuenta con tres bombas por lo que el fallo de hasta dos de ellas permite que la nave pueda seguir el vuelo hasta regresar al aeropuerto del que había partido.
Ante esta situación, el Boeing 777-200 ER -que se encontraba a 70 millas náuticas del suroeste de Nueva York- sobrevoló el Océano Atlántico para desprenderse de combustible y, así, poder aterrizar sin mayores peligros. No se registraron heridos.
“Luego de que nuestra nave experimentara una falla técnica a poco del despegue, se mantuvo en vuelo para quemar combustible y lograr un aterrizaje a salvo. Los pasajeros descendieron en la puerta de embarque y esperan un nuevo vuelo -programado para despegar esta mañana-”, explicó la aerolínea al medio AeroXplorer.
El usuario Variablecraft fotografió una de las piezas que se desprendieron del avión y quedó en el suelo.
El desperfecto, en esta oportunidad en el vuelo rutinario 149, no es el primero que sufre la aeronave. El pasado 9 de septiembre se vio obligado a permanecer en tierra en el aeropuerto de Ámsterdam tras una advertencia por humo, según agregó JACDEC.
La flota de United de Boeing 777 es una de las más antiguas en el mundo, por lo que requieren controles y servicios de mantenimiento más seguidos que otros modelos modernos.
(Crédito: Jacdec)
Así, en febrero de este mismo año, otro vuelo que cubría la ruta Denver – Honolulu también sufrió un desperfecto técnico en su motor. Este hecho derivó en la prohibición de estos modelos con motor PW4000 de volar, aunque fue una medida temporal que caducó en mayo.
A principios de esta semana, la aerolínea se vio forzada a cancelar cerca de 18 vuelos tras tener que retirar del aire 25 de estos aviones. Tras una auditoría interna, descubrieron que no se habían realizado las inspecciones correspondientes en los paneles del borde de ataque de las alas. El hecho derivó en la alteración de la grilla de vuelos entre la noche del lunes y la mañana del martes.
“Ya hemos completado las inspecciones en diez de esas naves y estamos trabajando con la Administración Federal de Aviación (FAA sus siglas en inglés) para normalizar los servicios con otros mientras se continúa con las pruebas, durante las próximas dos semanas”, afirmó la aerolínea el martes.