La diputada al Consejo Legislativo del estado Monagas (Clem) por la Unidad Democrática, María Carvajal, denunció este lunes 3 de octubre, en el inicio del año escolar 2022-2023, el riesgo que representan los planteles educativos por persistir los daños en infraestructura y la ausencia de los servicios básicos.
Por: Corresponsalía
La también dirigente del partido Un Nuevo Tiempo (UNT) destacó que durante un recorrido por las 10 parroquias del municipio Maturín, se pudo notar que “en la entidad no hubo una fiesta por el regreso a las aulas de clases. Quisieron montar un show, pero les salió mal”.
Detalló que “en las entradas de los planteles se observaron globos y pancartas de bienvenida, pero cuando se ingresaba a los colegios la situación era la misma del año anterior: infraestructuras a punto de colapsar, sin pupitres, baños destrozados, sin agua y electricidad”.
En este sentido, destacó que ante esta realidad fue muy floja la población estudiantil que respondió al llamado por parte del Ministerio de Educación. “A esto se suma el alto costo del uniforme: un pantalón cuesta cerca de los 15 dólares y un trabajador cobra 12 dólares”.
“Conversando con algunas docentes de los colegios visitados en el casco central de Maturín, Los Godos, San Simón, La Cruz, Santa Elena de Las Piñas, avenida Raúl Leoni, Jusepín, Las Cocuizas y La Pica, manifestaron que de 30 alumnos inscritos, solo asistieron 10”, dijo la legisladora regional.
“En las entradas había globos y demás, una línea de todas las escuelas: poco afluencia, misma realidad, no todos estaban en aulas”, agregó.
La diputada Carvajal catalogó como fracasado el plan de abordaje realizado por el Gobierno regional a planteles visibles, dejando de lado a los ubicados en comunidades vulnerables, incluso, a los del pleno centro como la Escuela Inés Bárcenas de Mota, en la avenida Raúl Leoni, el Jardín de Infancia Morichal, Vicente Salias y República del Uruguay”.