“No puedo evitar pensar que esto fue un crimen de odio impulsado por la xenofobia”, denunció en Twitter una de las profesoras del investigador chileno Pablo Guzmán Palma (25), una de las víctimas del doble homicidio que conmociona tanto a la Argentina como al país vecino.
El joven investigador fue encontrado muerto el sábado a la madrugada junto a la científica argentina Camila Behrensen (24), en el departamento que compartían en Kansas City, ubicado en Oak Street 4100, en un complejo del barrio Midtown, y que fue incendiado tras el doble homicidio.
Ambos eran estudiantes de la Clase de Investigadores Predoctorales 2020 en la Escuela de Graduados del Instituto Stowers de Investigación Médica y compartían hogar.
La conmoción por el doble homicidio copó rápidamente los medios chilenos, así como las redes sociales de sus compañeros de estudio, amigos y docentes.
“Tuve el placer de tenerlo como estudiante durante su estudio de grado y era brillante y una persona maravillosa. Qué tragedia”, escribió en Twitter Dasfne Lee-Liu, bioquímica chilena que fue profesora de Guzmán en Kansas.
Y señaló: “Tanto Pablo como Camila eran latinoamericanos y no puedo evitar que esto fue un crimen de odio impulsado por la xenofobia”. Los investigadores confirmaron que hay un sospechoso, pero todavía no hubo detenciones.
Pablo “habría tenido un futuro brillante, el mundo necesita más científicos como él, es una gran pérdida”, aseguró Lee-Liu.
Guzmán Palma, oriundo de Santiago de Chile, estaba titulado de bachiller en ciencias y posgrado en bioquímica en la Pontificia Universidad Católica de Chile, en 2019 y 2020. Se encontraba en Kansas City, en la región centro-noroeste de Estados Unidos.
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