Los caminos verdes, conocidos como trochas, son un riesgo porque al ingresar por esas vías, muchos productos incumplen normas sanitarias. Algunas de estas mercancías pueden poner en riesgo la vida de las personas.
Por Jesús Albino
En el caso de las medicinas, algunas serían elaboradas por laboratorios establecidos en otros países, pero también existen falsificaciones que bien podrían ser placebos o tener componentes que complican el cuadro clínico de los pacientes, con desenlaces fatales.
Los laboratorios venezolanos con amplia trayectoria y empresas de salud han creado mesas de trabajos y negocios para abastecer el mercado nacional, tratando de combatir al contrabando.
Guillermo Belloso, representante de división drogerías Cobeca, asegura que “la industria farmacéutica nacional ha venido en crecimiento de 10% a 15% por año. También los laboratorios que se habían ido, están regresando a Venezuela”. Afirma Belloso que la industria nacional puede abastecer la demanda del país.
Asegura que están trabajando para ofrecer mejores precios, ofertas, paquetes que sean atractivos y que las farmacias sean abastecidas con producto nacional y legal.
“Ofrecemos descuentos por volumen, hacemos promociones en productos como vitaminas, motivamos a los farmaceutas a llenar sus anaqueles con lo hecho en Venezuela”, afirmó una de las representantes de un laboratorio médico.
Luis Vivas, quien tiene una pequeña farmacia, dice que estas ruedas de negocios Cobeca permiten “que nosotros, los que no pertenecemos a grandes cadenas, podamos obtener líneas de crédito para obtener stock suficiente de acuerdo a la demanda”.
Las mesas de trabajo y negocios habrían generado que pequeñas farmacias en el país tengan abastecimiento con anticipación entre 90 días a 120 días, disminuyendo paulatinamente la compra de medicamentos no producidos en el país, que tiene como fin combatir el contrabando.
Según proyecciones, se espera que la industria farmacéutica venezolana crezca entre 20% a 30 en 2023.