La jueza María Eugenia Capuchetti, que investiga el caso por el atentado cometido el 1 de septiembre contra la vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández, negó este martes la existencia de cualquier “sospecha” sobre su objetividad, en respuesta a la petición de recusación hecha por la exmandataria.
“Mi imparcialidad se mantiene indemne y jamás se ha visto siquiera potencialmente afectada, ni en los hechos ni en el ánimo de la suscripta, por el manto de sospecha que la querella ha intentado deslizar en torno a mi rectitud en la función de jueza que ejerzo y seguiré cumpliendo”, escribió la magistrada en una carta de 43 páginas presentada ante la Cámara Federal.
Ahora este órgano deberá decidir si atiende la petición de los abogados de la que fuera presidenta de Argentina entre 2007 y 2015 para que Capuchetti deje la investigación o admite el escrito de la jueza y sigue en el caso.
La magistrada señaló en su escrito que “el cotejo de las actuaciones demuestra en forma cabal que se ha investigado y dado respuesta a todos y cada uno de los interrogantes introducidos”, lo que, en su opinión, “deja en claro el marco de imparcialidad, independencia y objetividad” de su actuación.
“Aquí no se advierten fundamentos serios o razonables que den sustento a la sospecha de imparcialidad alegada”, indicó la jueza, al tiempo que resaltó “las descalificaciones” hechas contra su persona son “propias de otros ámbitos y lejanas al ejercicio profesional del derecho”.
Fernández pidió la recusación de la jueza instructora del caso por el atentado cometido en su contra el 1 de septiembre por actuaciones “como mínimo negligentes” desde “el primer día de investigación”.
“Comparto la recusación a la Jueza Capuchetti en la causa del atentado contra mi vida, el 1 de septiembre pasado. A partir de la página 7 se detallan sus irregularidades y arbitrariedades, desde el primer día, cuando se borró el celular de Sabag Montiel”, publicó este lunes en Twitter.
El texto difundido señalaba que “Capuchetti no es ni objetiva ni subjetivamente imparcial”, por lo que se pedía su recusación y enumeraba varios aspectos de la investigación que, según la querella, justifican la decisión.
“Una serie de resoluciones netamente arbitrarias y la total parálisis investigativa nos han convencido de una manifiesta parcialidad contra esta parte”, detalló el documento que decía que Capuchetti era “alguien que ni sabe ni quiere investigar”.
En sus 37 páginas, el escrito detallaba elementos ya denunciados en un video de 3.06 minutos, publicado el pasado jueves en Twitter, en el que la exmandataria cuestionaba que algunos testimonios y detalles de la investigación no habían sido suficientemente analizados por la jueza.
Aquel video conectaba a dos de los tres jóvenes procesados y detenidos por el caso, Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte, con integrantes de Propuesta Republicana (PRO, centroderecha), partido de su sucesor en el Ejecutivo, Mauricio Macri (2015-2019), en concreto al diputado Gerardo Milman, mano derecha y encargado de Inteligencia durante la gestión de su exministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
La vicepresidenta sufrió un atentado en medio de las manifestaciones a las puertas de su domicilio que se dieron después de que el 21 de agosto un fiscal pidiera para ella 12 años de prisión por presunta corrupción en los dos períodos en que fue mandataria.
EFE