El rey Felipe VI de España llamó el sábado a los españoles a la “unión” y a la “responsabilidad”, mientras el país atraviesa una crisis institucional inédita por la falta de acuerdo entre el gobierno de izquierdas y la oposición sobre una reforma judicial clave.
“La división hace más frágiles a las democracias; la unión, todo lo contrario, las fortalece. En España lo sabemos por experiencia propia”, afirmó Felipe VI durante su tradicional mensaje de Navidad, alertando contra la fragilización de las instituciones.
“Creo que, en estos momentos, todos deberíamos realizar un ejercicio de responsabilidad y reflexionar de manera constructiva sobre las consecuencias que ignorar esos riesgos puede tener para nuestra unión, para nuestra convivencia y nuestras instituciones”, añadió.
“Han pasado ya casi 45 años desde la aprobación de la Constitución” de 1978, que instauró la democracia en España, “y claro que han cambiado, y seguirán cambiando, muchas cosas”, continuó el monarca en su discurso televisado de Nochebuena.
“Pero el espíritu que la vio nacer, sus principios y sus fundamentos, que son obra de todos, no pueden debilitarse ni deben caer en el olvido”, insistió.
El mensaje de este año llega tras la escalada de tensión de los últimos días entre el gobierno que preside el socialista Pedro Sánchez y el conservador Partido Popular (PP), principal formación de la oposición, sobre una importante reforma judicial.
La medida, destinada a permitir la renovación de cuatro magistrados del Tribunal Constitucional, fue aprobada la semana pasada por los diputados españoles después de que los partidos de la coalición en el poder la añadieran en forma de enmiendas a una iniciativa para modificar el Código Penal.
Pero estas disposiciones tuvieron que ser retiradas del texto sometido el jueves al Senado, después de que el Tribunal Constitucional aceptara un recurso de amparo planteado por el Partido Popular para detener su tramitación.
La decisión del órgano indignó a la izquierda, que acusó a la formación conservadora de haber “secuestrado las instituciones democráticas” españolas y de impedir que el Parlamento realizara su función legislativa.
Este punto álgido de la crisis se alcanzó tras cuatro años de pulso entre gobierno y oposición sobre la polémica renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), órgano encargado de nombrar a los jueces, entre ellos la mayor parte de los que integran el Tribunal Constitucional y el Tribunal Supremo.
Los dos partidos se acusan mutuamente de querer controlar el organismo imponiendo o manteniendo a magistrados de su tendencia política, a un año de las elecciones legislativas previstas para finales de 2023.
Durante su discurso, el rey Felipe VI repasó también otros aspectos de este año 2022 “complicado y difícil”, como la guerra de Ucrania -de la que resaltó su “trascendencia global” y lamentó la destrucción y el sufrimiento provocado al pueblo ucraniano-, o los efectos de la subida de los precios.
Pese a todo, el monarca confió en que España, “una vez más, saldrá adelante”.
AFP