¡Golpeados! Así se sienten los hoteleros y comerciantes de San Antonio del Táchira, debido a que les están llegando los recibos de Hidrosuroeste por el orden de 1.500.000 a 2.000.000 de pesos colombianos (equivalente a 326 y 436 dólares), pero el agua les llega, difícilmente, dos veces en el mes.
Por Anggy Polanco / Corresponsalía La Patilla
Por esta razón, el gremio de hoteleros de la zona fronteriza introdujo oficios de reclamos ante la Defensoría del Pueblo, en vista de que Hidrosuroeste no les da una solución al despacho de agua ni a los altos costos por el servicio.
Los empresarios hoteleros han invertido recursos para tener grandes tanques de almacenamiento de agua, que muchas veces no se llenan con las tuberías, por lo que deben comprar las cisternas con agua para abastecer a los hoteles.
Así lo dio a conocer Anggie Nieto, integrante de la Cámara de Hoteleros de la localidad, quien indicó que a pesar de que han introducido oficios de reclamos ante la Hidrológica Regional del Táchira, no les hacen caso.
Por el contrario, cada mes los recibos llegan con montos más altos.
Nieto resaltó que esta situación es un duro golpe para el sector comercial de la frontera en este momento. En vez de aumentar el flujo de huéspedes colombianos, más bien han disminuido, en razón que los hermanos del vecino país tienen miedo de venir a Venezuela y ser extorsionados por la fuerza pública.
Explicó que a los pequeños locales comerciales les están llegando los recibos de agua en 800.000 pesos colombianos, lo cual consideran que es una exageración, dado que esto hace cuesta arriba emprender en la zona, porque no solo deben pagar los servicios públicos, sino también alquileres, materias primas y personal.
Los precios de los recibos de la electricidad también han subido considerablemente y los apagones en la zona no cesan.
Deben poseer generadores de electricidad a combustión para evitar molestias en los huéspedes.
Esta irregularidad se viene presentando desde el mes de noviembre de 2022, indicaron varios habitantes de San Antonio consultados, y se ha extendido también a los inmuebles residenciales.
“De diciembre a enero aumentó al doble, y lo más grave es que no hay agua. El agua llega cada 15 días. Primero de 450.000 pesos pasó a 900.000 en los recibos. Y de 900.000 pasó a 1.850.000 pesos”, expuso otra prestadora de servicio hotelero.
Anggie Nieto consideró que tales aumentos son una falta de respeto, cuando la realidad es que el comercio de San Antonio todavía está decaído.
“Que no vengan aquí a explotar a la gente que todavía le sigue apostando por la frontera”, aseveró la empresaria.
