El abogado estadounidense Alex Murdaugh fue declarado culpable este jueves de matar a su mujer y a su hijo, poniendo fin a un juicio que se ha alargado durante seis semanas y ha causado un gran revuelo mediático en Estados Unidos.
El popular abogado, de 54 años, estaba acusado de disparar, en 2021, a su esposa, Maggie (52 años), y al hijo menor de ambos, Paul (22 años), en su casa, ubicada en una zona rural del estado de Carolina del Sur, donde la familia Murdaugh gozaba de gran influencia.
La acusación argumentó que Murdaugh cometió el crimen con el objetivo de impedir que salieran a la luz sus numerosos casos de malversación y lavado de dinero.
El propio Murdaugh reconoció durante el juicio haber mentido a la Policía sobre su paradero en la noche del crimen, pero aseguró que se debió a la paranoia que le provocaba el consumo de drogas, y negó entre lágrimas haber disparado a su familia.
El juez encargado del caso, Clifton Newman, dijo que dictará su sentencia más adelante, según el periódico The New York Times. La pena mínima por asesinato en Carolina del Sur, donde se ha desarrollado el juicio, es de 30 años de cárcel.
La acusación ya ha adelantado que pedirá la cadena perpetua.
Tanto la mujer como el hijo del abogado fueron disparados varias veces con un rifle y una escopeta, aunque las armas del crimen no se han encontrado, ni tampoco manchas de sangre u otro tipo de evidencias físicas.
Lo que sí se encontró fue un video grabado por Paul Murdaugh poco antes de morir donde se escuchan las voces de ambos progenitores, echando por tierra la coartada inicial del abogado, que aseguraba no encontrarse en la casa en el momento del crimen.
Cuando fue acusado del asesinato de sus dos familiares, Murdaugh ya se encontraba en prisión, a la espera de juicio por un centenar de cargos relacionados con sus negocios como abogado.
EFE