Un terremoto de magnitud 6,0 azotó el martes el sur de Filipinas, informó el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), pero las autoridades locales no reportaron víctimas ni daños importantes.
El sismo de poca profundidad se sintió a las 14H00 (06H00 GMT) y tuvo su epicentro cerca del municipio de Maragusán, en la provincia montañosa de Davao de Oro, en la isla de Mindanao.
Cerrylyn Dapiton, de la agencia de gestión de desastres de Maragusán, afirmó que se produjo un desprendimiento de tierra cerca de una carretera, pero no afectó a ningún conductor ni bloqueó el tráfico.
Imágenes publicadas en la página de Facebook del gobierno local mostraban a pacientes en camas o en sillas de ruedas en las afueras de un hospital del que fueron evacuados.
El temblor duró unos 30 segundos y estuvo seguido por varias réplicas, dijo la cabo Stephanie Clemen, de la policía de Tagum, a unos 40 kilómetros de Maragusán.
“Nos pusimos inmediatamente debajo de los escritorios y cuando el suelo dejó de temblar, salimos afuera”, dijo a la AFP.
“Todavía estamos fuera porque se acaba de producir una réplica moderada”, apuntó.
Aunque el terremoto aparentemente no provocó destrucción, fue suficientemente fuerte para “provocar miedo”, agregó la agente de policía.
Filipinas se ubica en el conocido como Cinturón de Fuego del Pacífico, un arco de alta actividad sísmica y volcánica que se extiende desde Japón hasta el sureste de Asia y la cuenca del Pacífico.
AFP