Tras años de intentos para sanear más de un kilómetro de playa, que había sido tomada por invasores que ocuparon módulos turísticos para vivir, la alcaldía de Urbaneja, en el estado Anzoátegui, comenzó la demolición de varias infraestructuras en Playa Cangrejo, que ponía en riesgo la vida de varias familias.
Corresponsalía lapatilla.com
El plan articulado entre varios niveles de gobierno (nacional, regional y municipal) busca rescatar un kilómetro de playa apta urbana, que fueron ocupadas de forma ilícita.
“Hoy vamos a comenzar con la demolición y saneamiento de los sectores que ya han sido verificados, que ya han sido desalojados por personas que vivían en ellos, de manera ilegal e insegura, pues estas instalaciones no cumplen con las medidas de seguridad para que una persona pueda pernoctar, pueda vivir”, dijo Manuel Ferreira, alcalde de Lechería.
Con maquinaria pesada, los módulos que van siendo desalojados, son destruidos uno a uno “para evitar que vuelvan a ser tomados, invadidos, para darle paso a la liberación de espacios”, aseguró Ferreira.
En total son 16 familias y cerca de diez prestadores de servicios, que hacían vida en baños públicos, módulos de información, restaurantes y otros espacios que fueron abandonados por gestiones gubernamentales anteriores.
Es importante destacar que las invasiones se habían denunciado por la comisión de delitos como tráfico de personas, venta de estupefacientes, explotación infantil laboral y hasta prostitución, razón por la que el Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo, órganos de protección del niño, niña y adolescente, entre otros, se mantenían desplegados en la zona.