Las autoridades ucranianas han transferido a la Federación Rusa a todos los prisioneros de guerra heridos de gravedad cuya situación permitía trasladarles a su país, según informó la Dirección ucraniana para el Tratamiento de los Prisioneros de Guerra en su canal de Telegram.
La medida se ha tomado “en cumplimiento de las obligaciones internacionales” asumidas por Ucrania como firmante de la Convención de Ginebra y se ha aplicado en coordinación con la Cruz Roja.
“No se trata de un intercambio de prisioneros, sino de una repatriación”, dice la autoridad ucraniana que ha tomado la medida.
Según Kiev, Ucrania no ha exigido ninguna contraprestación al retorno de estos prisioneros, cuyo número no ha sido especificado.
La nota oficial en que se informa de la repatriación critica a Rusia por “despreciar de manera sistemática las normas internacionales” sobre el tratamiento de los prisioneros de guerra.
“Rusia no sólo utiliza como rehenes a civiles y no combatientes; también niega a los representantes del Comité Internacional de la Cruz Roja el acceso a los lugares de detención”, dice el comunicado, que denuncia también que los prisioneros de guerra ucranianos son privados de todo contacto con sus familias.
Desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania, numerosos prisioneros de guerra ucranianos intercambiados por cautivos rusos han denunciado haber sufrido torturas y malos tratos durante su cautiverio en Rusia. Algunos de ellos no recibieron tratamiento médico adecuado y presentaban síntomas de malnutrición.
También este viernes, y en una operación sin relación con la repatriación de los prisioneros rusos heridos, Ucrania anunció haber recuperado los cuerpos de 83 combatientes caídos que han sido transferidos desde territorios ocupados por Rusia.
EFE