A 27 años de asesinato de la vocalista, diferentes mujeres han seguido su camino en la industria del regional mexicano, una escena músical históricamente predominada por hombres pero cuyas figuras femeninas se han convertido en grandes exponentes del mismo, e incluso, han forjado una vertiente de este ámbito musical que busca penetrar hacia otros campos.
Por infobae.com
Fue en 1984 cuando se da a conocer una grabación semi-casera llamada Mis Primeras Grabaciones de un grupo musical familiar oriundo de Corpus Christi, Texas. Encabezado por Selena Quintanilla en compañía de sus hermanos Suzette en la batería y su hermano Abraham (posteriormente conocido como AB) en la guitarra bajo la dirección de su padre, Abraham Quintanilla. Si bien el inicio de la agrupación era para presentarse en fiestas de quince años, eventos familiares y escolares así como espacios frecuentados por mexicanos, el grupo en un par de años daría origen a una de las estrellas de la música vernácula mexicana más importantes de la historia.
Entre 1981 hasta 1987 fue que la popularidad de Selena y Los Dinos, con el control de su padre, fue acrecentándose en el sur de los Estados Unidos y era la vocalista, que con una voz privilegiada llamaba la atención del público que en un inicio no aceptaba la propuesta del grupo familiar. Así, en 1989, cuando se forma la división latinoamericana de EMI Music, Selena es firmada por la disquera junto con la banda, sin embargo, la mirada estaba puesta en ella.
La influencia de Selena en la música regional mexicana
En la etapa del Cine de Oro Mexicana fueron voces como Lucha Villa o Flor Silvestre quienes daban forma a la música ranchera pasando por la banda y tambora participando en películas y televisión.
Sin embargo fue tras el éxito que la llamada Reina del Tex-Mex tuvo que más mujeres vocalistas se aventuraron en este género como Alicia Villareal, Ana Bárbara, Priscila Camacho (Priscila y sus Balas de Plata), Pilar Montenegro y Zayda durante la década de 1990 e inicios de los 2000 donde también surgieron figuras como Jenni Rivera y las hermanas Vicky y Marisol Terrazas de Horoscopos de Durango y se convirtieron en los rostros de finales del siglo XX las que llevaron esta pauta hacía otra vertiente, donde se convertían en estrellas de la farándula popular como lo hizo Selena, incursionando en otros espacios del entretenimiento más allá del cine y televisión sin alejarse de la música norteña e incluso, integrándose a otros géneros como lo hizo Quintanilla.
Selena proponía una identidad de moda
Con lo que varios allegados llamaron la implacable aprobación de su padre, Selena buscaba salirse del arquetipo de estrella de norteño así como de la línea que Abraham Quintanilla marcaba y era su gusto por la música disco y pop lo que llevó a la cantante a integrar elementos de estas vertientes en sus vestuarios e incluso en la mezcla de ritmos que integraba a sus álbumes.
Su icónico labial rojo así como su larga cabellera o los bustiers que la mexico-americana portaba, se convertían en moda para cientos de jovencitas, incluso para aquellas que no hablaban español y aunque la filial tuvo que cerrar tras la sorpresiva muerte de la vocalista, su incursión en el ámbito de la moda permitió que otras cantantes de regional decidieron integrarse a dicha industria tras probar el éxito en la música.
En 2013, a poco menos de un año de su muerte en un accidente aeronáutico que la denominada Diva de la Banda tuvo su primera tienda de ropa abierta para el público, proyecto que había cocinando desde antes de su muerte y fue su hermana Rosie Rivera quien tomó el control de la idea para comercializar la imagen de la cantante.
Alicia Villareal por su parte creó una identidad con su cabello teñido en rubio y dos trenzas características, imagen que también fue imitada por jóvenes que consumían la propuesta que la cantante de Te Aprovechas proponía como parte Grupo Limite.
Fueron las hermanas Terrazas, voces principales del grupo de duranguense Horoscopos de Durango las precursoras del estilo “buchón” en mujeres: cercano a moda de diseñador pero que conservaba la influencia del norte comos sombreros, botas, cinturones de cuero al mismo tiempo en que el maquillaje cargado definía una moda que ha evolucionado.
Diversificación para entrar a más públicos tenía en mente Selena
En varias ocasiones, Selena manifestó su intención de experimentar con otros géneros musicales como el pop y el rock, influenciada también por su esposo Chris Perez, quien tenía su propia banda de rock, sin embargo, se asegura que era su padre quien no permitía a la cantante trascender debido al éxito que el tex-mex y la technocumbian estaban asegurando a la cantante y por ende a su familia.
En 1994, Selena incursiona en el mundo de las boy bands y colabora con Barrio Boyzz en la canción “Donde quiera que estés (Wherever You Are)”, si bien ninguno de los dos artistas se conocía, fue una de las canciones de mayor éxito para ambos.
De acuerdo a personas cercanas a Selena, al momento de su muerte, la cantante se encontraba en la producción de un álbum crossover, el cual integraría pop y hip-hop.
Y posterior a estos intentos, diferentes mujeres del regional mexicano buscaron anexarse a otros géneros musicales. Pilar Montenegro fue una de las cantantes que hacía sus pininos en el ambiente de la banda pero su éxito Quitame a ese hombre del corazón tuvo que lanzarse también en un remix pop, Jenni Rivera también dio a conocer algunas versiones de sus éxitos en esta modalidad para quienes no eran grandes fans del regional mexicano.
Ana Bárbara por su parte se ha permitido hacer camino en varios géneros con baladas como Lo busqué, Loca o Bandido, una mezcla de pop y grupero que resultó ser una de las canciones más populares de la solista.